amor gitano

CAPITULO 33

¡Ya no lo soporto mas ¡- gritaba Candela dando una fuerte patada al suelo – Isabel hermana tienes que ayudarme

-¿qué te sucede? – se acerco hasta ella y la guio hasta el sofá para tomar asiento a su lado - ¿has vuelto a discutir con Nicolás? – pregunto inquieta al ver a su hermana tan alterada , Candela agacho la cabeza avergonzada mientras negaba con la cabeza , su hermana le acaricio la espalda dándole ánimos

- Cuéntame que te trae a mi carreta a estas horas de la noche- tras unos momentos Candela decidió hablar al fin

- Ay momentos en los que parece que realmente parece que lo nuestro por fin valla a funcionar – suspiro perdiéndose en sus recuerdos tratando de recordar cada detalle –

-¿qué quieres decir? – dijo Isabel devolviéndola a la realidad

La joven cubrió su rostro entre las manos tratando de reprimir el nudo que se empezaba a hacer en su garganta se tomo unos instantes para recomponerse

-Es cierto que nuestra relación era un desastre al principio ni tan siquiera me dirigía la palabra me odiaba, pero desde hace tiempo las cosas han cambiado entre nosotros. juraría que ha empezado a sentir algo por mí. – izo una pausa para mirar a su hermana – pero no es suficiente. Tienes que ayudarme.

--no ay nada de que yo pueda hacer - suspiro -

-Tu no lo entiendes – bramo poniéndose en pie – necesito que cumpla con migo antes de que - sus labrios se apretaron evitando de que las palabras salieran de su boca

-¿qué es lo que tanto te asustas? – dijo Isabel con firmeza poniéndose a su lado ,conocía a su hermana y sabía perfectamente que sus acatos iban mas allá de que Nicolás no compartiera su cama – estoy esperando – volvió a decir nerviosa al ver que guardaba silencio

-Necesito que olvide a Rocío lo antes posible – exploto al fin apretando los puños llena de impotencia -¿cómo puede tener tanto poder sobre él?

- eres estúpida si piensas que lo que tiene Rocío sobre él es poder, porque te equivocas hermana, su amor va más a allá de la carne o la distancia. no puedes borrar todo lo que significan el uno para el otro de buenas a primeras.

-Tu no entiendes – grito Candela encarándose con su hermana – Escuche a padre decir que nos dirigimos esas tierras

-Ahora lo veo claro – exclamo con firmeza – tienes miedo

-Pues claro que tengo miedo. si con todos estos años separados sigue presente en su mente y su corazón imagínate que pasaría si la sabe cerca de él – negó con la cabeza - ¿quién podría evitar que la fuera a buscar?

-Tienes que confiar en él. Nicolás es un hombre de palabra y no te faltaría de esa forma

-Pero

-Pero nada Candela, un amor como el de ellos no se acaba. además fuiste tú quien se metió en medio sabiendo que su corazón estaba ocupado

-No me regañes más. he venido para pedirte ayuda no un sermón .- dijo poniendo los ojos en blanco

-No. Candela, a mi no me hables en ese tono.- exigió agarrándola por el brazo con fuerza – tienes lo que te has buscado. tú y tu rivalidad con Rocío. ¿ en qué pensabas cuando le dijiste a padre que lo amabas ? por dios hermana , la dábamos por muerta y tu solo pensabas en quitarle al novio – Candela sonrió triunfante

-Y lo conseguí. – los ojos de Isabel se volvieron una fina línea

-Cuidado – advirtió apretando los dientes – no tientes la suerte. ¿acaso crees que has ganado? si, es cierto, tienes un marido. Uno que no comparte tu cama. POR DIOS NO COMPARTE NI TU CARRETA – grito – llevan más tres de años sin verse y no has sido capaz de arrancarla de su corazón ni mucho menos de su mente ¿de verdad crees que algún día la olvidara?