Capitulo I Sacrificium

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La noche era oscura, completamente negra pero las estrellas brillaban más que nunca... La Luna se veía tan... hermosa, parece que esta tan cerca que su blanca luz caerá pronto sobre toda la ciudad. Mientras contemplaba y estudiaba el hermoso paraíso que tenía ante mis ojos escucho un ruido algo peculiar... no sonaba como un gato travieso que se había escabullido por la ventana ni como un indecente ladrón... era como una melodía que me insinuaba a seguirla. Aquella misteriosa melodía venia del oscuro cielo y entonces ahí lo vi... Era una deidad sin duda alguna, tenía una forma semi-humana con brillantes ojos blancos y piel hecha de galaxias, un extraño símbolo estaba dibujado en su frente. Se acercó a mí y sentí la mayor tranquilidad que pude haber experimentado nunca. Me susurro algo que no logre comprender pues estaba en un idioma desconocido y después me desvanecí junto esa extraña figura.

Voz infantil: Mikal! Mikal! Mira lo que tengo! Es un insecto extraño no crees? Lo encontré en el jardín frontal.

Mikal: Si gustas podríamos investigarlo más tarde, después de tu clase de gramática.

Voz infantil: Pero falta mucho... y si se escapa?

Mikal: No huirá, te prometo que no dejare que salga volando.

Voz infantil: Lo prometes?

Mikal: ...Lo prometo...

-Un llamado de atención despierta a Mikal de un golpe.-

Señor Augus: Joven Mikal, no puede quedarse dormido en medio de una investigación.

Mikal: Lo lamento mucho, no volverá a pasar.

Mikal Angelus, de 16 años estaba camino a resolver un extraño caso. Hace ya dos años que su familia fue brutalmente asesinada mientras él no estaba en casa y como único hijo sobreviviente tenía que continuar con la promesa a la reina "Investigar, resolver y llevar a la corte al culpable de atentar contra la paz de Der Himel en honor a la corona" esa era la promesa que volvió a los Angelus nobles y estarían condenados a trabajar como sus detectives. Así como él había otros 4 que desarrollaban papeles importantes en el reino.

El señor Augus, su tutor estaba sentando enfrente de Mikal repasando el informe del caso. Lincom Zaduel había sido encontrado muerto en su casa por su vecina la mañana anterior pero su muerte no parecía tener alguna explicación lógica y si no parecía lógico ahí entraban los Angelus.

Mikal: cuanto falta para llegar?

Augus: Menos de dos minutos.

Mikal: Porque puerto Zeus tiene que estar tan lejos?

Augus: Tiene que estar cerca de las costas para que los barcos puedan tener fácil acceso.

Mikal: asesinato, cierto?

Augus: no se sabe... por eso estamos yendo a investigar.

Mikal permaneció en silencio mientras observaba la ventana, esperando llegar a su destino. Cuando finalmente llegó un ambiente oscuro y pesado les dieron la bienvenida...

Mikal: Augus, tu registra el exterior... yo veré el cuerpo.

Augus: entendido.

Mikal entró a la casa. Las luces estaban apagadas y la cocina perfectamente ordenada todo estaba impecable pero cuando subió por las escaleras el suelo estaba repleto de hojas de papel con dibujos de astros, al final de la habitación había un gran balcón con un telescopio que tenía al lado el cuerpo.

-Interesante...- pensó Mikal. Se acercó al cuerpo y observo que había algo azul en su garganta... Se puso unos guantes y levanto el pesado cuerpo esperando encontrar alguna herida o rastro de violencia pero no había nada. El estado del cuerpo era impecable de hecho, parecía que estaba dormido en vez de muerto. Mikal pidió que retiraran el cuerpo y le hicieran una autopsia. Una vez sin el cuerpo cerca investigo la habitación centímetro por centímetro y se tomó el tiempo de ver todas las hojas de papel tiradas en el piso. Algunas de ellas eran garabatos de estrellas y documentaciones de eclipses, lluvias de estrellas y constelaciones pero otras perecían más bien algún tipo de oraciones extrañas hacia una deidad desconocida... tenían dibujos difíciles de entender y demasiados símbolos alrededor de una Luna, de esta última había tantas iguales que parecían copias. Mikal puso las hojas que le llamaban la atención en un maletín y fue a buscar a Augus.

Petalos azulesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora