◆◇ѕσмσѕ ιηѕтαηтєѕ◇◆

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Pequeño extra del capítulo anterior. ❤

El camino al hospital había sido rápido, afortunadamente no había mucho tráfico en las calles, así que fue sencillo llegar. Estacionaron el auto y todos bajaron juntos para después correr hasta donde Dereck les había dicho que estaban.

—Buenas noches, enfermera— habla Emilio llegando al mostrador — estamos buscando la habitación de Nikolas Caballero.

—Oh, claro, permítame un segundo.

La enfermera comienza a buscar información en la computadora, los chicos parecen estar desesperados y lo peor es que Dereck ya no responde los mensaje como para que él les diga en que habitación es.

—¿Y bien?— pregunta Emilio.

—Habitación 311— señala el pasillo —todo derecho hasta topar con pared y gira hacia la izquierda, en ese pasillo está.

—Muchas gracias, señorita— agradece haciendo señas a los demás para que vayan a buscar la habitación.

Al llegar al pasillo indicado, todos se sorprenden al ver a todos su amigos ahí.
Cuauhtémoc, Aristóteles, Lucas, Mateo, Diego, Lara y Emma, Alessandra, Brad, Ernesto junto al pequeño Erik y finalmente Dereck y Eduardo que se mantenían Unidos esperando noticias de Nikolas.

—Chicos— menciona Dereck acercándose a abrazar a su novio.

—¿Como está Niko?— pregunta Joaquín con el pequeño Francisco en brazos.

—Está en la sala de parto— explica Eduardo —Ramiro es quien está atendiendo el parto.

—Bueno, eso me alivia mucho— expresa Emilio tratando de respirar con más tranquilidad.

Ramiro fue quien estuvo en el parto de Joaquín, él se encargó de ayudar a que Francisco llegara al mundo, así que confía plenamente en que el bebé de Niko y Eduardo estará bien.

—Si, lo sé— asiente Eduardo —pero no me han dejado pasar.

—En un momento lo harán— tranquiliza Ernesto tomando la mano del mayor —. Se que te preocupa mucho, pero Ramiro nunca inicia un parto sin el otro padre esté presente.

—Eduardo— la voz de Ramiro interrimpe la conversión —ya puedes pasar, tu bebé está apuntó de llegar.

Barquín besa la frente de su hijo y corre hacia donde está Ramiro. Los nervios de todos aumentan, saben que el embarazo de Nikolas no es de alto riesgo, pero también son conscientes de que algo puede fallar, así que sólo esperan a que alguien salga y les den informes. Los adultos se mantienen platicando sobre el estado de Nikolas, los niños juegan sentados en el piso; mientras tanto, los adolescentes se encargan de calmar a Dereck, quien es el más nervioso de todos.

—Tranquilo, Dereck— habla Lara —tu hermanito o hermanita estarán bien.

—Lara tiene razón— apoya Lucas —es de gran ventaja que el embarazo no haya sido de alto riesgo, eso es buena señal creeme.

—¿Quieres que te traiga nos algo de comer?— pregunta Axel sin alejarse de su novio.

—Esa es buena idea, ¿ya comiste?— cuestiona Brad.

—No, no se preocupen, chicos— habla Dereck —ya cené, justo cuando estábamos terminando de cenar fue que las contracciones empezaron.

—Oh, entonces... ¿No necesitas nada?— pregunta Lara de nuevo.

—No, con que estén aquí es suficiente— agradece con una sonrisa —. No creí que fueran a venir, pensé que sólo vendrían sus papás.

—Bueno, nos pegamos como chicles— menciona Lara haciendo reír a todos —. Queremos conocer al nuevo integrante de nuestro pequeño club de amigos. Ya somos seis adolescentes, tres niños y ahora serán dos bebés.

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