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Choi Yuna

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Choi Yuna

Mi alma volvió a mi cuerpo, justo cuándo pude ver quién era el supuesto fantasma. Se trataba de nada más ni nada menos que Namjoon, que por obra del destino solo llevaba sus pantalones.

Estaba confundido, igual que yo, que solo pude sonreír apenas, teniendo en cuenta que podía desmayarme ahí mismo por ver su pecho a la vista, y sus abdominales, se notaba que cargaba consigo un cuerpo realmente trabajado, que debía ser estudiado por la ciencia.

Relamí mis labios, evitando su mirada, hasta que recordé qué literal estábamos en la misma habitación.

—¿Qué haces aquí?

Cuestioné.

—Aquí duermo, es mi habitación.

Musitó y solo pude volver a verle. Ah, qué tonta soy, tuve que prender aunque sea la luz para fijarme en donde me había metido la torpe de Bora. Estoy segura de que ni siquiera escuchó bien las indicaciones de Jungkook y me dejó aquí.

—No sabía, simplemente seguí a Bora.

Me levanté de la única silla que había aquí, dispuesta a irme, pero apenas me moví al ver como este dio un paso hacia mí.

—Quédate. Hay otra habitación y seguro iré ahí —Me sonrió— Y, ¿quieres que te tome una foto? Antes de espantarte, vi que ibas a tomar una.

Lo pensé un momento, para ver hacia atrás y los edificios. Le ofrecí el móvil, dejándolo en sus manos con la cámara abierta. Me acomodé, tratando de peinar un poco mi flequillo de manera improvisada y vi a Namjoon, quien estaba listo desde hace unos segundos. Volví a la cámara y solo hice un par de gestos, esperando a que me dijese que ya estaba, pero parecía tomar muchas fotos, más viendo como empezó a moverse de lugar, cambiando de ángulo, haciéndome sentir avergonzada.

—¡Oh, basta! —Tape mi rostro, para que al final se detuviese y me diera el móvil, con una foto en pantalla— Me gusta esta.

Susurré viéndola.

—A mí también, por eso te la muestro. Pero las demás, donde estás distraída, lucen bien.

—Gracias.

Quedamos en completo silencio, y para que no fuese incómodo, me levanté, quedando de pie con la vista a los edificios, sintiendo el aire fresco y pregúntame si tendrá frío, era obvio.

—Sabes, es el único balcón de las habitaciones —Miré como se había puesto a mi lado— A veces salgo cuándo quiero pensar un poco, cuándo leo o cuándo quiero estar tranquilo.

Parecía pensativo, con las manos en su bolsillo, y yo como tonta, viendo su pecho subir y bajar. Era agradable, pero sería aún mejor si se cambiara, es que no estoy soportando.

WARM | KIM NAMJOON [Sinful #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora