El amor es ironía

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El amor es una cosa extraña.

Los hay de muchos tipos, formas y colores. Hay amor de amigos, de hermanos, de familia y de pareja... y desde que nací hasta hoy, quince años después, nunca he sentido este tipo de amor por parte de nadie.

Nací como el segundo hijo de la familia Ishigami, por lo que las expectativas eran que, por lo menos, estuviera a la altura de mi hermano mayor, pero incluso desde niño, esto terminó siendo demasiado complicado para mi, por lo que terminé resignándome a mi lugar como el "hermano fracasado" de la familia Ishigami y olvidarme de todo; tanto de la herencia de la compañía de mis padres, como de la aprobación o el cariño de mi familia.

En la amistad no me resultó mejor, ya que siempre he sido alguien tímido y cuando quiero acercarme a la gente, siempre terminan asustándose como si fuera alguna clase de bicho raro... En el pasado, al menos podía enorgullecerme de mi sentido de la justicia, quería sentirme un héroe, una especie de mártir que sufre en silencio pero que protege a la gente a su alrededor desde las sombras... pero eso no resultó bien.

Primero fue con Miko Iino, una santurrona que era la delegada de su clase y que quería que todos respetaran hasta las normas más absurdas, por lo que todos la molestaban. Yo intenté ayudarla pero al final, para ella siempre seguí siendo el mismo bicho raro... el verla en mi preparatoria solo me hace recordar todo el tiempo que desperdicié intentando ayudar a alguien a quien le doy igual. Que desperdicio.

Y luego fue con la señorita Ootomo... prefiero no hablar al respecto. Para no hacer el cuento largo, por meterme donde no me llaman, terminé partiéndole la cara a un idiota, y tuvo que venir el consejo estudiantil de la preparatoria para salvarme y que yo pudiera terminar la secundaria...

Al final, lo de "ser un héroe entre las sombras" no me resultó en lo absoluto, y terminé aceptando que en la escuela también sería un perdedor.

A pesar de ser un miembro del consejo estudiantil, yo no tengo ni una pizca del respeto que tienen mis compañeros, ¿Y por qué lo tendría?

No soy el alumno del cuadro de honor que es el presidente Shirogane, o la destacada estudiante, deportista y heredera como la vicepresidenta Shinomiya... y para colmo, no tengo el carisma ni la cabeza hueva que si tiene la secretaria Fujiwara para llevarse bien con todos.

Siempre voy a ser un fracasado del que la mayoría piensa mal, pero la peor parte es que no aprendo, parece como si tuviera alguna adicción por fracasar, porque me enamoré, y no de cualquier chica, me enamoré de...

- Superiora Fujiwara, ¿Qué hace? -Apenas entraba en la habitación del consejo, era recibido por un intenso aroma a pegamento y la visión de esa pelirrosa usando una brocha para esparcir pegamento sobre una especie de piezas de madera encima del escritorio del presidente, quien estaba ausente.

- Ah, hola Ishigami -Saludó con esa voz infantil y chillona.- ¿Sabes? Escuché a mi profesor de matemáticas decir que el ajedrez es el juego más maravilloso del mundo, pero te haz preguntado, ¿Por qué no hay un "Ajedrez 2"?

Mientras que ella me miraba con ojos centelleantes, como si hubiera descubierto la carne que no engorda, yo sólo podía arrugar los ojos y aguantarme el "Que estupidez" que estaba a punto de salir de mi boca.

- Además, el ajedrez es muy aburrido y sin sentido, ¿Cómo un caballo va a saltar, pero solo en L's? Además, en esta versión podrás encontrar objetos escondidos en el tablero que pueden ser trampas o ayudas que están escritas en estas tarjetitas -Ilusionada explicaba su juego, tomando las tarjetas sin notar que tenía los dedos llenos de pegamento, por lo que pasó los siguientes treinta segundos tratando de quitarse las tarjetas de encima.

Enamorado de una cabeza huecaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora