Dos tontitos en fuga

Prólogo

--Entonces... ¿me puedes decir por qué estamos siguiendo a la chica? —Hoseok arreglaba sus lentes de sol y se encorvaba en su asiento más de lo usual. Él manejaba el maldito auto mientras que el idiota de su costado, muy sereno, tenía que sacar la cabeza por la ventana como si no le importara ser arrestado por acecho.

Aunque la culpa era de Hoseok, por haber seguido a este extraño chico con aires de grandeza y vanidoso a mas no poder.

--¿No puedes ver lo obvio? —señalo con el ceño fruncido y señalándolos descaradamente.

--No. —Hoseok respondió con simpleza.

Los señalo nuevamente.

--Él es el culpable de que me estén siguiendo ahora, y por consiguiente a ti.

Hoseok abrió la boca con ofensa.

--Oh, no, amigo. —posteriormente lo señalo con enojo. —Te siguen a ti. Apenas te maten, zafare mi trasero de este puto país y me cambiare el nombre a Seok.

Tuvo el descaro de mirarlo con aburrimiento y burla: --¿Enserio? ¿Seok? ¿De Hoseok?

--¿Cuál es el problema? —pregunto Hoseok sorprendido y ofendido. --¿Tu cómo te llamarías?

--En dado caso que no me maten, gracias por eso, creo que me pondría el seudónimo de "V". Ya sabes, es genial. Solo imagínate ir por la vida con un nombre tan genial, las nenas caerían rápidamente. Serio y bonito.

--Tonto e indiscreto. —respondió Hoseok volteando los ojos. —Primero, ¿V? Es lo más ridículo que escuche en mi corta vida...

--Eres un año mayor. —replico.

Hoseok apretó los dientes y lo ignoro.

--Segundo, ¿no crees que es más sospechoso que Seok? Solo imagina a un estúpido caminando por la calle llamándose como "V" y entonces la policía te detiene por tu documentación y tu nombre nuevo es una letra que te hace ver como Al capone joven, más bobo, y coreano.

--Gracias por compararme con Al capone, pero no es el punto. —dijo acomodándose la chaqueta de cuero caqui y mirándolo con obviedad. Hoseok apretó los puños. —Creo que la policía, en ese caso, me tendría miedo porque de parecer un mafioso, podría sacar un arma en cualquier momento y molerlos a tiros o mis secuaces que protegerían mi espalda 24/7.

--O ellos te esposan primero. Sea como sea, Seok es mejor que V, pero no espero discutir con un tipo que asecha a su ex, cuando antes había dicho "las nenas caerían rápidamente". Ya veo porque te dejo.

--Y yo sigo creyendo que nunca tuviste novia, chico frígido. —se encogió de hombros cuando lo dijo.

Hoseok apretó los puños y lo encaro: --Ya te dije que la tuve, fallábamos a menudo, pero no funciono, punto.

--¿Sabes usar tu cosa o eres una mierda en eso al igual que poner nombres aleatorios?

Estaba a punto de golpearlo, cuando entonces me callo poniendo su dedo en los labios del contrario. El susodicho lo quito de un tirón y lo miro con enfado, aun así, escucho: --Ya salieron del restaurante. Maldita escoria, Jungkook...

--Así que el hombre que tiene a tu chica tiene mejor nombre que tú, no me sorprende. —Hoseok se cruzó de brazos y miro al parque lleno de señores y niños, los primeros jugando y los demás leyendo o conversando.

Podría ser uno de esos adultos, tal vez leyendo un libro mientras comía helado, pero re tonto Hoseok decidió seguir a tonto aquí presente en su aventura, porque... porque era igual de estúpido y muy buena persona que jamás tendría una recompensa por ello.

La mejor vida.

Taehyung grito señalando: --La está llevando en mi auto. Le partiré las bolas por esas dos cosas, maldita sea. Arranca el maldito auto ya.

Hoseok vio como la chica se subía a un coche de lujo color azul con el hombre. Hace media hora habían estado en la cafetería de la esquina y habían pasado esos minutos tratando de verlos por la ventana. Yacían en el carro rojo de segunda mano de Hoseok, jugando a los espías a unos metros como todos unos acosadores, porque Taehyung, AKA estúpido egoísta, quería saber a dónde iban.

A este paso, Hoseok quería gritarle a la pareja que lo llevaran consigo y lejos de Taehyung, para variar. Estaba enloqueciendo con este hombre y pronto se suicidaba o mataba al tipo con sus propias manos por ser tan desesperante.

--Deja de ser tan incompetente y mueve el maldito auto. —ordeno cuando el auto azul comenzó a movilizarse.

Hoseok sonrió con humos por las orejas y a propósito encendió el auto despacio. Poco a poco comenzaron a seguir a una velocidad prudente al auto azul de Taehyung. Este a su costado estaba con la mirada fija y seria, digno de todo un hombre prepotente que saldría a gruñirle a todo el mundo como animal de las cavernas.

Hoseok quería pegarse contra el volante y morir.

Ni siquiera sabía cómo llego hasta este punto... en realidad, si sabía, pero le avergonzaba como.

No lo contaría, era vergonzoso y podría llorar de recordar.

 🕴

esta no era la historia que tenía que colgar, sin embargo, la hice en menos de un mes (super express), así que denme un reconocimiento, ahre. 

en fin, quería decir que esta historia es sin sentido en algunas partes (soy una exagerada), porque lo hice a la volada, pero aun así, espero de corazón, que se lo pasen bien leyéndola. esta historia me ayudo a dejar de pasar un mal rato por la perdida de mi teléfono, ya que tiene lo que me gusta: comedia y romance apasionado. 

prometo que se viene un o.s y (si todo sale bien) prontito la tercera historia de mi saga, que la deje en stand by por weona. 

stream al nuevo álbum de Tae y al álbum de Hoseok. 

bye, besos en el anuel <3.