Le había tomado varios minutos, poder tranquilizarse, pero aún así seguía guardando silencio, su mirada se encontraba perdida en la nada, estaba muy asustada.
-¿Qué te sucede Olivia? -Preguntó Lucas tomando su mano y llamando su atención-.
-Está aquí -Respondió dejando escapar un par de lágrimas-.
-¿Quién?
-Dylan -Pronunció su nombre con voz temblorosa-.
-¿Quién es Daylan? -Lacuestionó-.
-El tipo que me drogó y abusó de mí -Recordó entre lágrimas-.
LUCAS
La vio quebrarse y optó por no seguir con las preguntas, ya tendría tiempo para averiguar quién era ese maldito y cobrárselas.
La llevó hasta su cama y la arropó para que descansara, no quería hostigarla, solo quería que se sintiera segura.
-Abrázame Lucas -Pidió refugiándose en su pecho-.
-Todo está bien ojitos -Besó su frente haciéndola sonreír, llevaba años sin escuchar ese apodo que Lucas usaba para dirigirse a ella cuando eran pequeños-.
-Lo está ahora -Dijo correspondiendo a su abrazo-.
OLIVIA
Dejó que aquel dulce joven le diera la paz, que ella tanto necesitaba, y que la hacía sentirse segura, estaba agradecida por tener a Lucas a su lado.
ABRIL
Desperté encontrándome con el rostro de Alexian, que aun seguía dormido, lucía tranquilo a pesar de todo el caos de la noche anterior.
El sol brillaba con fuerza afuera, y por primera vez en muchos días, me sentí tranquila, estaba consciente de lo que había pasado con Alex, pero la verdad no me importaba, era mucho el daño que ese desgraciado me ocasionó, que ya ni siquiera puedo sentir empatía por él.
-Buenos días caramelito -Saluda Alexian besando mi frente y estrechándome entre sus brazos-.
-Buenos días -Respondo con una sonrisa-.
-¿Cómo amaneciste caramelito?
-Bien, muy bien -Recalcó- ¿Y tú?
Su mirada hace un breve recorrido por mi rostro, y sus labios se apresuran a responder mi pregunta con un beso que parece interminable.
-Debo regresar a casa, antes de que papá llegue -Le informo-.
-Esa bien Aby, pero primero iremos a desayunar.
Nos damos una ducha breve antes de regresar y hacemos una parada en la cafetería para desayunar, son las nueve de la mañana y aún falta un par de horas para que papá regrese.
Decidimos dar un paseo por el pueblo para quemar algo de tiempo, aunque terminamos encontrándonos con Hans en el camino.
-Hola chicos -Saluda- ¿Podría hablar con ustedes un momento?
-Sí claro ¿Sucede algo?
-Sí, cuatro de tus compañeros han desaparecido desde ayer en la tarde, Alex, su hermana Olivia y dos de sus amigos ¿Los han visto?
-No -Me apresuro a responder- pero si sabemos algo te avisaremos.
-Te lo agradecería mucho, sus padres están muy preocupados.
Veo a Hans alejarse sin poder evitar sentirme tensa, la situación puede conmigo, y me preocupa que Alexian pueda meterse en problemas por mi culpa.
-Todo está bien caramelito -Dice Alexian tomando mi mano- no tienes porque preocuparte.
-Olivia no aparece -Comento- ¿Y sí estaba ahí? ¿Qué tal que haya seguido a su hermano, y los haya visto?
-Estuvimos antes que ellos en el lugar, vimos a todos los que fueron, Olivia no estaba en su grupo -Me toma del rostro y me da un corto beso en los labios, para tranquilizarme- no tienes de que preocuparte.
A las dos de la tarde Alexian me deja en casa, papá aún no ha llegado y yo aprovecho su ausencia para cambiarme y preparar la cena, aunque hambre es lo último que tengo.
Mi padre llega a las siete y optamos por cenar, mientras me cuenta como le ha ido en el trabajo, conversación a la que no consigo prestarle atención, necesito saber dónde está Olivia.
-¿Todo bien Abril? -Cuestiona mi padre y yo finjo una sonrisa-.
-Sí papá, estoy bien ¿Por?
-Te ves algo distraída esta noche.
-No es nada.
Mi celular suena y yo no tardo en contestarlo, es Alexian, aunque yo finjo hablar con Lucas acerca de las tareas, me tranquiliza saber que Olivia está bien y que no sospecha nada.
Cuando el reloj marca las once, decido que es hora de dormir, pero mi sueño se ve opacado por las pesadillas que me atormenta, pero que son calmadas por quién se ha convertido en mi nuevo ángel.
Siento unos brazos rodear mi cintura, brazos que consiguen darme paz, Alexian está aquí.
-Ya pasó caramelito -Susurra- estoy aquí -Besa mi frente-.
-¿Algún día terminarán?
-Con el tiempo te acostumbras, me pasó a mí, siento mucho haberte involucrado en todo esto -Se disculpa- siento que hayas visto morir aquel tipo.
Decido abrazarme y refugiarme en el pecho de Alexian, que actúa como el mejor calmante para todo la ansiedad, que me da esta situación y son sus manos haciendo mimos en mi cabeza, las que consiguen que pueda dormir tranquila.
Es él quien me da paz y también me la quita, él y solo él, mi caótico Alexian.
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ALEXIAN "Lo Bizarro Del Amor"
RomanceEra todo aquello con lo que nunca soñé, era oscuridad, era maldad, era esa mezcla exquisita de locura y placer que pocas veces podías conocer, capaz de poner mi mundo de cabeza y de llevarme ha desear lo prohibido, con él podía pasar esos límites qu...