Salvaje Divinidad. [🎶] Yoomin. ¡TERMINADA!

Capitulo 54

El vinculo del rey del mundo era quien se encargaba de las acciones que se tenían que tomar en el castillo, en responsabilidades que la reina le encomendó al ver la iniciativa de la criatura de luz, en la fe que le tenia su majestad. Ha sido de otorgarle a los candidatos de herederos los preparativos para recibirlos, para darle una nueva y cálida bienvenida en el palacio.

Jimin veía rostros nuevos, entre los criados de las distintas provincias veía especies que se dirigían con respeto al vínculo que gobernó el corazón del demonio. Era en la pequeña fiesta de bienvenida que Jimin se encontraba con su príncipe y otros herederos que compartían otras mesas.

Entre la multitud estaba la princesa Umji que no dejaba de ver junto su hermana Hyejin, a Jimin con la misma corona que le fue otorgada por la reina. Tan rápido Jimin se había convertido en el favorito de la reina Min; a pesar que Jimin a veces tenia trabajo extra, que le encomendaba, eran los resultados y las nuevas conexiones con otros clanes y reinos, lo que lo mantenía.

Para ambas princesas no les gustaba esta pequeña fiesta de bienvenida en la que las tradiciones de luz eran relevantes en esta acción, al menos no para Umji.

−Cada vez que lo veo, pienso en la traición a nuestras costumbres. −Menciona Umji a su hermana menor− Las tradiciones de nuestro clan cambia, cuando el príncipe Hoshi cumplió los cinco años, no cumplido Park Jimin por la ceremonia.

−Nuestro sobrino es un ser de luz, querida... Aunque no deja de actuar como un rey, eso es imperdonable.

−No se que estaba pensando nuestra reina. 

La princesa Umji interrumpe al sentir pesadez en su garganta, ella creia que de debia a la distinta comida que estaban acostumbrado, algo que nota Hyejin.

−¿Estas bien Umji? Desde que íbamos en camino has mostrado malestares.

−Iré que me revise Chen.

−Espero que no sea algo de que preocuparse.

Ellas miraban en como cada criatura era admirada por Jimin, tomando su tiempo para depositar su fe al hijo del rey. Aun disfrutando de los bocadillos Jimin estaba feliz con tener que ver a su hijo menor disfrutar de una celebración misma a su raza, pero era aquella sensación que tenia Hoshi al no ver a su hermana en ninguna parte.

−Papá, quisiera retirarme para ir junto mi hermana Milagro. ¿Es necesario que este aquí? Me gustaría ir al jardín con mis ángeles y querubines.

−Hoshi tienes que acostumbrarte porque eres un heredero, eres el hijo del rey y no puedes seguir paseando como antes. −Habla Jimin en tono bajo y con discreción− No eres igual a tu hermana, eres un heredero que participara en la ceremonia.

El ángel de su majestad se mantenía en su lugar simplemente jugando con la comida, mientras suspiraba a los ideales de su majestad. El pequeño Hoshi una salvaje divinidad como su padre, era un chico indefenso de corta edad, uno que no se le hacía relevante los aires de guerra, aun cuando fue entrenado como tal y quien menos de todos los herederos quería participar.

Llegando la hora escuchan el llamado de la llegada de la reina, cada uno se pone de pie para tener que sospechar Jimin en lo que tramaba su primera hija.

Milagro se mostraba impecable de la mano con la reina Min, aquella mujer grande que sonreía en tener que ver a su familia nuevamente unida camina a dirección a la mesa de Jimin. Milagro es quien ayuda a su abuela a acomodarse en la silla, a lo que la princesa toma asiento junto su hermano Hoshi.

−Reina Min bienvenida.

− ¿Has empezado el discurso Jimin?

−Nunca sin la presencia de la princesa y de usted.