duck

¿feliz cumpleaños? - introduccion

Había pensado iniciar con un había una vez, pero no lograba acomodar mis pensamientos así que iniciaré donde empezaron mis problemas.

Durante las vacaciones de verano conseguí mi primera novia, aun que suene increíble en mis 17 años de vida no había conseguido hablar con mujeres correctamente, aun que tal vez eso fuera culpa de connie y sus hermanas, les solían decir las aldini por su apellido, a mi en lo personal me sonaba a pizzeria por lo que no acostumbraba decirles así , son mis vecinas y podría decirse que amigos, si es que se les puede decir así ya que hasta la fecha han odiado que las vean en público conmigo. Ese aspecto de nuestra relación lo odio pero eh aprendido a aceptarlo, soy mas alto que el promedio con mi metro noventa de altura. 

Aparte de tener poco atractivo si no es que nulo, tengo una cicatriz en forma de luna desde la barbilla hasta el pómulo. Por otra parte no cuento con sentido alguno de la moda, aunque esto lo sabe cualquiera a simple vista, despues de todo no cualquiera usa una camisa de yoda con unos shorts a cuadros y pantuflas, llegando a este punto ya te habrás dado cuenta de que amo las actividades manuales y las películas por lo que no suelo salir a hacer deportes, o por decirlo de otra manera soy un friki. Pasemos de auto ayudas y lecciones de ropa eso ya me da igual.  Aprendí a aceptarlo y hasta en veces hago bromas sobre ello, quizá la broma mas graciosa que eh hecho fue planear un futuro con connie una de las aldini, ella lo dejo muy claro; no te veo así, lo siento pero muy apenas me agradas. Mi error lo siento, por favor corrijan me si me salgo del tema.

En fin, de lo que quería hablarles era sobre el día en que conocí a libby, al viajar de vacaciones al pueblo de mi tía.
Ella era un deleite a la vista con sus ojos grises, largo cabello negro y piel lechosa. Provocaba que cualquiera volteara a verla con su gracia y belleza.
Debatí mucho conmigo mismo antes de cobrar él valor para acercar me a conversar con ella, fue increíble hablar con ella.
no solo era hermosa, era tan agradable y risueña, lo mejor de todo fue que ella tan bien amaba las películas clásicas. menciono en particular en las que aparecía Alpacino. Y me vuelvo a salir del tema, perdón soy distraído. A lo que iba fue que al oírla decir eso se me ocurrió invitarla a ver una película a casa de mi abuela.
Por suerte desde el verano pasado que vine me deje mi laptop y proyector, por lo que al combinarlos con el estéreo de mi abuela, dio como resultado una velada increíble llena de películas y miradas robadas.

charlamos un par de semanas  y salimos un par de veces después de ese día. Hasta que un día me arme de valor y le confesé que me gustaba. Estaba eufórico cuando acepto con la condición de que algún día la llevara a dar un tour por la ciudad de la que venia. 

Ese fue el verano mas increíble que eh tenido pero no se confundan soy realista, sabia que al terminar esas vacaciones se acababa la relación en especial por como la note los últimos días. Estaba tensa todo él tiempo y me ignoraba de vez en cuando, así que al despedirme del pueblo me despedí de de lo que sentía tan bien. 

Al volver a casa estaba feliz aun, mi cumpleaños estaba pegado a las vacaciones, por si se lo preguntan es el 7 de agosto. mi tía me había propuesto quedarnos una semana mas pero probablemente las aldini se ubieran molestado si las excluía, por lo que rechace la propuesta volviendo él día 6.
Y por increíble que suene en mi cumpleaños me dieron el peor regalo posible, pero no se corten les contare todo con lujo de detalle:

me levante como cualquier otro día, al salir de la cama me di una ducha y me cambie. Como era un buen día me puse mi camisa favorita.
Era un insulto a la moda con su color beige, pero quien puede negar lo genial que se ve marlon brando en ella.
Maldije para mis adentros y  refunfuñe mientras bajaba las escaleras sin camisa

-tía ya no me queda otra camisa vamos a tener que ir a comp...-

al bajar el ultimo escalon me di cuenta que estaba connie junto a sus hermanas y mi tía esperándome, que vergüenza.