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Al acabar la clase y tocar el timbre para el receso, los compañeros de Rodrigo incluyendolo, se levantaron ansiosos por salir de aquél salón, pero algo detuvo al castaño.

–Carrera, debemos hablar sobre sus actitudes, ¿puede darme un momento?

–C-Claro señor– Rodrigo se dió la vuelta para mirar a su profesor el cuál estaba a unos pocos metros de él.

Cuándo el salón estuvo vacío y ellos se encontraron solos, Ivan decidió acercarse más a Rodrigo.

–Tus actitudes no están siendo del todo correctas, lo sabes, ¿verdad? No puedes simplemente llegar tarde y ponerme una excusa absurda, además de qué estás evitando hacer lo que yo te ordeno. ¿O acaso ya tienes listo el informe que te pedí hace dos días?

–No señor, perdóneme pero aún no lo termino, deme un tiempo más por favor, se lo ruego.

–Rodrigo, ya se me está acabando la paciencia pequeño, quiero el informe mañana mismo, y no hay más plazo– Iván lo observaba con una cara seria y a Rodrigo se le erizaba la piel con esa mirada tan penetrante directamente apuntando a sus verdosos ojos.

–Gracias señor, l-le prometo que mañana estará listo–Rodrigo le dió una pequeña sonrisa nerviosa a el mayor y se fue del salón. Realmente no tenía ganas de hacer aquél informe pedido por su profesor exclusivamente a él, ¿pero que más podía hacer? no quería terminar en dirección una vez más.







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El martes había llegado, y con eso la entrega del informe a Ivan.

Rodrigo estuvo toda la noche redactando, buscando información, analizando para completar el informe. Su muñeca incluso se le había llegado a dormir, en toda la noche tuvo que tomar al menos 3 tazas de café para quitar el extrémo sueño que invadía su cuerpo y no lo dejaba mantener los ojos abiertos.

El pobre del castaño no pudo darse el lujo de descansar, porque el tiempo se le había pasado y cuando terminó el informe se percató de que ya estaba amaneciendo.

Tenía más ojeras de lo normal, realmente se veía hecho un desastre total. Las miradas hacía él lo incomodaban mucho mientras llegaba al salón unos 10 minutos antes de que la clase de lengua empezara, ya que los martes tenían a primera hora y el profesor Ivan siempre estaba antes en el escritorio para organizar algunas cosas.

Cuando ya estuvo frente al salón, vío a su profesor por la ventana que tenía la puerta. Realmente le parecía un tipo muy lindo, lastima que fuera su profesor y tuvieran tanta diferencia de edad. Rodrigo era menor aún, tenía 17 años mientras que Ivan 24, si bien para el amor no hay edad como dicen, Carrera no cumplía aún la mayoría de edad y estaba mal. Sin obviar el hecho de que en una institución está prohibido cualquier tipo de romance alumno-profesor.

Salió de su trance cuando se dió cuenta de que Ivan lo estaba mirando fijamente a través de la ventana, se pusó muy nervioso pero aún así decidio entrar para darle el bendito informe que tanto le había pedido.

–Buenas tardes profe, acá tiene el informe que me pidió– El castaño tenía una voz más aguda y apagada de lo normal, debido al cansancio que llevaba su cuerpo ahora mismo. Al igual que sus pasos, sus piernas y manos no funcionaban del todo bien asi qué fue a lento paso hacía el escritorio que ocupaba el mayor.

–Muy bien Rodrigo, lo leeré ahora mismo.

Y dicho y hecho, a los pocos segundos ya estaba revisando el informe, su cara era inexpresiva por lo que Rodrigo no podía lograr descifrar lo que pasaba en su cabeza mientras leía.

–Esto está mal, Carrera. ¿Te dí más tiempo para qué? Ni un simple informe sabes hacer, que decepcionante.


Hola hola, este capítulo lo logré hacer más largo, espero que les esté gustando ♡

Cualquier error ortográfico que noten me avisan, no se olviden de votar, bye bye.

𖦹 𝙏𝙀𝘼𝘾𝙃𝙀𝙍'𝙎 𝙋𝙀𝙏   ʀᴏᴅʀɪᴠᴀɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora