❥ ; 11 - Esperaré

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Al cabo de unas horas el omega despertó y, aunque seguía totalmente ido se sentía mejor con la presencia de Cyno y Kaveh, aunque más con la de Cyno.

—¿Ya despertó la bella durmiente?— cuestionó Kaveh con Kamran en brazos. —Tus cachorros quieren ver a su madre así que tienes que levantarte y ducharte, no acepto un no.

Tighnari miró confuso la situación y se acurrucó más en el pecho del beta.

—¿Y... Alhaitham?— preguntó buscándolo con la mirada.

—Creo que ha ido a cambiarle el pañal a Dante— explicó el beta. —¿Cómo te encuentras?

—Me duele todo...— dijo Tighnari. —Pero me alegro de que estéis aquí, os necesitaba...

—Y ahora que estamos aquí, venga, al baño que hay personitas que te necesitan a ti— repitió Kaveh sosteniendo a su pequeño. —Alhaitham vendrá en seguida.

Justo entonces, el alfa cruzó el umbral de la puerta y se sorprendió al ver a Tighnari despierto. Con cuidado dejó al bebé en la cuna y se acercó para ver al omega. Él era el único que podía apreciar el gran cambio que había dado en solo unas horas.

—Es un alivio verte reaccionar... no sabes cuánto— dijo el alfa con sus ojos ligeramente brillantes y se sentó a su lado. Era incómodo por la presencia de Cyno ahí, pero le dio igual en ese momento. —¿Quieres que te prepare un baño?

Tighnari se impulsó por sí mismo para levantarse un poco y ahora fue a Alhaitham a quien rodeó con sus brazos mientras lloraba, aunque no era un llanto comparable al de los días anteriores.

—Lo siento... debo oler muy mal...— sollozó contra el alfa. —Sí, y si puedes ayudarme te lo agradecería... no quiero estar solo.

Alhaitham no dudó en corresponder al abrazo con fuerza y suspiró. Había pasado verdadero miedo imaginando que Tighnari pudiera hacer alguna locura, por eso se alegraba tanto de su decisión de llamar a Kaveh.

—Claro que te ayudaré... sabes que estoy para lo que necesites— susurró mientras acariciaba con suavidad el cabello de su chico.

—Nosotros nos encargamos de los pequeños— dijo Kaveh y dejó a Kamran en su cuna para tomar en brazos ahora a Aletheia. Estaba un poco más grande que cuando la vieron y había cambiado bastante, ahora se parecía incluso más al beta. No quiso comentar nada al respecto, no quería romper el momento.

—Apenas los he visto...— dijo Tighnari a punto de llorar otra vez, parecía que se estaba apagando de nuevo al pensar en eso.

—Después ni se te ocurra separarte de ellos, pero necesitas asearte, guarro— Kaveh intentaba sonar normal, como si no le preocupara y solo le estuviera regañando, pero también sintió miedo de que pudiera hacer algo y, por ende, Alhaitham sufriera aún más.

—shh, olvida eso ahora... tendremos tiempo de sobra para disfrutar de ellos, ¿vale?— dijo el alfa y besó la frente de su chico con dulzura. —Ahora necesito que pienses en ti y en ese baño, paso a paso.

Tighnari asintió y se aferró a Alhaitham para que lo cargara. Aún le dolía todo el cuerpo, en parte de haberse pasado la mayor parte del tiempo tumbado.

—Cyno ¿quieres tomarla en brazos? Es muy curiosa— le preguntó Kaveh. Aletheia observaba todo y parecía como si de verdad pudiera comprenderlo, aunque los bebés tenían un campo de visión limitando.

Mientras Alhaitham se ponía en pie con Tighnari en brazos, él y Cyno cruzaron miradas de una forma algo tensa. Fue el alfa quien terminó asintiendo, dándole a entender que aceptaba su presencia y que se acercara a su hija, que en parte era hija de ambos. Se fue de allí en dirección al baño y solo entonces Cyno caminó hacia Kaveh en cuyos brazos reposaba la bebé.

Destinos entrelazados (omegaverse) [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora