Epílogo

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Cuatro años después...

Amanda y Alan regresaron felices a su mansión en Kensington. La boda de David y Jonathan había sido una celebración sencilla, pero hermosa y emotiva. Sabían que a la pareja le esperaba un gran futuro de felicidad, de eso no había dudas:

_ Llamaré a mi madre para decirle que ya estamos de regreso._ dijo Amanda besándolo en la mejilla.

_ Yo revisaré el correo._ dijo Alan y comenzó a echar un vistazo a los sobres que el mayordomo había ido dejando encima del escritorio de su despacho. Había uno en particular que le llamó la atención. Era pequeño. No tenía remitente.

Con una mueca de curiosidad lo abrió. Solo tenía una tarjeta en su interior con lo que parecía ser un número telefónico. Más picado aún tomó su móvil y marcó el número. Aguardó unos segundos, hasta que una voz se escuchó del otro lado:

_ Sabía que no dejarías de comunicarte.

_ ¿Perdón? ¿Quién habla?

Se escuchó una risita burlona:

_ Vaya Alan, ¿tanto tiempo ha pasado que ni siquiera eres capaz de reconocer mi voz? Eso me ofende.

_ Disculpe... ¿Quién es usted? ¿Por qué me hizo llegar este número? ¡Explíquese o le aseguro que colgaré ahora mismo!

Por respuesta sonó otra carcajada. Molesto, Alan colgó:

_ Idiota._ masculló.

El teléfono volvió a sonar. Era una llamada del número con el que había acabado de comunicarse. Furioso atendió:

_ ¡Escúcheme imbécil! ¡No me gustan esta clase de bromas así que mejor...!

_ Sigue teniendo el mismo mal carácter de cuando estudiábamos en Milford Abbey... Monsieur Chocolat.

El rostro de Alan Clancy se desencajó. Se puso en pie. Todo su cuerpo estaba temblando. En todo el mundo, en toda su vida, solo una persona le había llamado con ese sobrenombre. Era un apodo cariñoso que una persona le había impuesto en privado hacía muchos años atrás. Solo tres personas sabían de aquel mote: Él, David y Charlie, que había sido el de la ocurrencia. David jamás lo llamó de esa forma tras la muerte de Charlie. Pero entonces...

_ ¿Quién habla?_ preguntó con voz temblorosa.

Hubo una pausa prolongada:

_ Adivina..._ dijo la persona misteriosa en un tono casi jocoso.

_ ¿Charlie...?_ se atrevió a pronunciar Alan casi a punto de desmayarse.

Y la llamada se cortó.

FIN

Florida, martes 15 de agosto del 2023

(Continuará próximamente en la tercera y última parte de esta trilogía, EN EL CORAZÓN DE LA BESTIA)



EN LOS OJOS DE LA BESTIA (2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora