Naruto traicionado por Hinata

CELEBRACIÓN

Han pasado seis meses desde la pelea entre Naruto y los Otsutsuki, la amenaza fue resuelta por nuestro rubio quien casi pierde la vida junto con el enemigo, pero gracias a dios todo resultó bien, los daños en la aldea fueron reconstruidos y los alrededores poco a poco comenzaban a recuperar el color que los caracterizaba. En la aldea estaba empezando a amanecer y las voces y el movimiento empezaban a hacerse notar, sin embargo, en la residencia Uzumaki el día empezaba de forma diferente.

-¿Qué hora es? Dice un adormilado Naruto mientras apaga el despertador como puede, debido a que en su pecho yacía desnuda su prometida y futura esposa, Yugao.

-5 minutos más. Dice la peli púrpura mientras abraza a su prometido.

-Si la futura señora Uzumaki sigue durmiendo, tendré que despertarla de formas que tal vez no le gusten tanto, o tal vez sí- Dice de forma pícara en su oído el Uzumaki- Además, tenemos que ir con la abuela Tsunade a ver los últimos detalles para la boda y no quiero llegar tarde y ser su saco de boxeo.

-Jeje eso sería divertido, pero tienes razón. Dice Yugao.

Hace 3 meses

Luego de la recuperación de Naruto y la reconstrucción de la aldea, todos celebraban la victoria y la paz que por fin iban a poder disfrutar, Naruto, no perdió tiempo, e hizo lo que alguna vez soñó con su amiga de la infancia Hinata, pero esta vez con su novia Yugao, con quien pensaba pasar el resto de su vida y quien le daría lo que más soñaba incluso más que el convertirse en Hokage, una familia, asique con la ayuda de sus amigos y mentores, preparó un picnic en la cabeza del cuarto Hokage, todo bien elaborado.

-Naruto-kun, ¿A dónde vamos? Pregunta aún dudosa Yugao.

-Bueno, te dije que era una cita, pero no iremos a comer a un restaurante normal o a Ichiraku

-¿El señor Naruto Uzumaki no desea comer ramen? Vaya, este día es histórico.

-Oye, no te burles, pero te aseguro que te gustara lo que te tengo preparado.

-Ahora sí que me estas preocupando. Naruto solo le sonrió y siguieron caminando de las manos por la aldea mientras la gente de vez en cuando lo saludaba con respeto.

Al llegar a la cima de la montaña Hokage, Yugao vio la sorpresa que había en la cabeza del Yondaime, se sorprendió de gran sobremanera y sin decir nada abrazó a Naruto por la cintura mientras se acercaban al lugar, al horizonte se podía ver como el sol se estaba ocultando dándole un momento aún más especial a lo que estaban viviendo.

-Esto es, hermoso. Dice algo emocionada la mujer.

-Tomemos asiento y empezemos a comer, tengo algo de hambre.

El lugar estaba decorado con una manta roja bastante grande, dos velas, un florero en medio con unos girasoles, y pétalos de rosas dispersos por toda la manta, era un ambiente muy cálido y romántico, pero esto solo lo pesaba Yugao, ya que Naruto no le prestó atención a la decoración que hicieron sus amigos ya que estaba muy nervioso pensando como proponerle matrimonio, tenía muchos miedos e inseguridades pero él nunca retrocedía a su palabra y no lo iba a hacer ahora que tenía su felicidad en su bolsillo dentro de una pequeña caja.

-Este lugar es muy especial para mí, aquí viví momentos tristes, algunos felices, pero también es un lugar que me da paz. Empezó a narrar Naruto.

-Veo porque, este lugar es muy tranquilo.

-Al principio no sabía porque me gustaba tanto estar aquí, pero luego de saber sobre mis padres lo supe, y empecé a disfrutar estar aquí y saber que siempre me acompañaron.

-Eso es seguro, vi como peleaba tu padre en la guerra, y por lo poco que se de Kushina, estoy segura que no te dejarían a la suerte de Dios jeje.

-Eso creo, pero desde ahora no estaré solo aquí, ya que este será nuestro lugar especial.