La mañana de los Vetter iba de lo más normal, los señores se iban a trabajar y sus hijos a la escuela.
– Oye ¿Ya sabes cuál es tu casillero y tú horario? – preguntó Max a su prima.
– Uhm no, tengo que ir a dirección – respondió Alessia, demasiado distraída.
– ¿Y sabes dónde queda la dirección? – Alessia asintió sin prestar atención a la pregunta de su hermano – ¿Qué estás viendo que estás tan distraída? – preguntó está vez Max, pero fue ignorado – Alessia ¡Alessia!
– ¿Qué quieren? – respondió ya cansada.
– Te preguntamos si sabes dónde queda la dirección y que es lo que estás viendo que estás tan distraída.
– Es que mire a un chavo que tiene mucho parecido con un amigo, pero no sé si sean la misma persona.
– ¿Es quien creo que es? – preguntó Max y ella asintió, antes de que alguien pudiera decir algo más Alessia dijo lo siguiente:
– ¡Emilio!
La emoción de Alessia era demasiada, el nombrado la recibió con los brazos abiertos y la misma emoción. Los presentes miraban con asombro la escena, pues Emilio nunca había demostrado tanta emoción al ver a alguien y aunque llevaba poco tiempo en la escuela, la mayoría de los alumnos ya sabían cómo era su carácter.
– ¿De dónde se conocen? – preguntó Shelley con mucha curiosidad.
– Alessia y Emilio se conocieron es España en la secundaria, se separaron el año pasado por problemas personales de la familia de Emilio, pero nunca perdieron la comunicación.
Les explico Max.
– Entonces, en conclusión, son mejores amigos.
Ian y Max asintieron.
– Sabes, se ven muy bien juntos como para creer que solo son mejores amigos. Argumentó Shelley con una sonrisa después de verlos atentamente por unos minutos.
– Tienes un poco de razón, pero Emilio ya está enamorado de alguien más.
Explicó Ian, Shelley no muy convencida asintió.
– Tal vez no sea creíble, pero Alessia nunca se ha enamorado y si eso llegará a pasar sería realmente un milagro. Explico Max para luego irse junto a Emilio y Alessia.
– Nos volvemos a ver pequeña Vetter – dijo Emilio con una sonrisa.
– Es bueno verte.
– Emilio hermano nos volvemos a ver – dijo Max mientras se saludaban. Hablaron un poco y luego Max se fue junto a Ian.
Alessia y Emilio siguieron platicando mientras iban camino a la dirección, para luego ir al casillero de Alessia.
– Oye Emilio ¿sabes dónde queda el salón central 3a?
– Siempre es lo mismo contigo, pero por suerte queda a lado de mi salón – los dos rieron, en el camino por accidente Alessia chocó con un chico causando dolor en su brazo izquierdo.
– Less ¿Estás bien?
– Si, solo duele un poco.
– Vamos a la enfermería para que te revisen anda.
– Tranquilo, solo fue un pequeño golpe, aparte hoy en la tarde voy a revisión.
– ¿Revisión?
– Si, me hice un esguince hace una semana y traigo un yeso así que supongo que el dolor causado fue por el movimiento.
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SOLO ÉL
Teen FictionRegresar y empezar de nuevo eso es lo que me esperaba, pero al menos eso ayudaría a sanar las pequeñas heridas que aún tenía. Sabía que nada sería fácil, pero tampoco tenía que ser difícil. Al final ya lo habíamos decidido aunque el no estuviera muy...