I'm drunk in the back of the car
And I cried like a baby coming home from the bar
Said I'm fine, but it wasn't true
I don't wanna keep secrets just to keep you
And I snuck in through the garden gate
Every night that summer, just to seal my fate
And I screamed for whatever it's worth
I love you, ain't that the worst thing you ever heard?Cruel Summer- Taylor Swift
La locura mas grande que he cometido en mi vida, aparte de escribir esto claro, ha sido decirte como me sentía. Nunca imagine que llegaría a contarte cuánto me gustabas, aunque te oculté montón de cosas.
El simple hecho de haberte confesado que me gustabas ya es demasiado. Lo hice porque no aguantaba más, eso es cierto. Pero nunca estuvo en mis mas remotos planes. El hecho de sentir la necesidad de der sincera contigo me terminó obligando a actuar.
Recuerdo que fueron días bastante duros. Estaba lejos y tenía demasiado tiempo para pensar. Mi nombre y sobrepensar son sinónimos, entonces comenzó esta locura de libro. Si es que se le puede denominar como tal.
Terminé contándote todo, pidiendo perdón mil veces porque la culpa me consumía. Solo pensaba y sentía que nuestra amistad estaba condenada por mi culpa. Que me alejarías por verte de esa forma. Yo realmente llegué a sentir que había cometido un error garrafal y que necesitaba contarte y disculparme. Ni siquiera quería que fuésemos nada, mi confesión no era una propuesta, era nada más que eso: una revelación de información.
Estábamos bien como amigos y yo estaba feliz con ello, no necesitaba más. Desde ese momento todo cambió, debería de agradecer que al menos no me sacaste de tu vida. Pero siguen doliendo las dudas, porque si no hubiese sido tan tonta nuestra amistad no se hubiese fracturado.
Porque a pesar de todos nuestros intentos por fingir que no pasaba nada, si pasó. Ya no era igual, yo sentía que debía medir cada cosa que hiciera o dijera a tu alrededor. Porque notarías cualquier actitud que delatara como me sentía. Eres despistado pero observador, eso me asustaba muchísimo.Seguir saliendo a pasar el rato juntos me hacía sentir bien, porque por unas horas no importaba nada. Nadie sacaba a relucir la incómoda situación, tampoco habían miradas de desprecio. No estabas molesto, no me hacías sentir tonta. No había razones para sentirme rara. Digo, me seguías gustando, se me seguía revolviendo la vida solo de mirarte, eso no iba a cambiar de un día a otro. Pero no había momentos incómodos a tu alrededor. Al contrario, seguías siendo mi paz y calma, mi lugar seguro.
Aún así, una vez te fuiste ya nada de eso importó. Realmente no me importaría hacer el tonto con tal de poder volver a verte otro rato. Incluso no me lo pensaría dos veces antes de hacer el ridículo si con eso puedo tenerte al frente así fueran 5 minutos. ¿Qué más te puedo decir? Fue una locura confesarte mis sentimientos. Pero hubiese sido una locura mayor que te fueras sin saberlos.
Supongo que el destino sabía lo que nos deparaba el futuro, y no quiso que tuviera que arrepentirme por no contarte. Destino cruel, no me avisó que estaría extrañandote así de mucho. No me malinterpretes, no cambiaría el conocerte o el enamorarme de ti, pero definitivamente me hubiese gustado estar un poco mas preparada para tu ausencia. Porque pasan los meses y me sigues doliendo como el primer día.
Porque te fuiste, de pronto te ibas a ir al otro lado del mundo y yo sentía que podía morir de angustia. Fue un tiempo tan duro que ni siquiera recuerdo mucho. Fueron semanas dolorosas, despidiéndome cada vez que te veía por si en realidad esa sería la última vez. Estaba destruida, no solo no podía tenerte, tampoco estarías cerca. Sería solo cuestión de tiempo antes de perder contacto. Me alegraba por ti, te mudarias y comenzarías tu vida en un nuevo lugar. Probablemente seas más feliz de lo que hubieses sido si te quedabas aquí. Pero una parte egoísta de mí quería que no te fueras, que te quedaras. Me mordía la lengua al tenerte cerca y desear pedirte que te quedaras. Uno, no tenía ni el más mínimo derecho, dos, de ser posible te hubiese montado yo misma en ese avión. Que pudieras irte fue lo mejor que te pudo haber pasado. A pesar de que doliera, tu felicidad y prosperidad siempre estarían en primer lugar.
No se cuánto lloré, odio llorar, lo sabes. Pero no podía simplemente evitarlo, no había noche en la que no pensara en ti y terminara llorando hasta dormir. Se convirtió en rutina, una dolorosa. Despedirme de ti, la primera vez que lo hicimos, cuando aún no sabíamos que el vuelo fallaría y lo pospondrian, fue de las cosas más difíciles que he hecho. No quería soltarte, no podía dejar de abrazarte sabiendo que esa podía ser la última vez que me sentiría asi de segura en tus brazos. Quería solo llorar y hacer un berrinche, pedirte que te quedaras. Opte por tragarme las lágrimas y abrazarte mas fuerte de lo que he abrazado a nadie nunca. Soy vagamente conciente de que besaste mi pelo y me dijiste que me cuidara. En ese momento estaba mas concentrada en guardar el como se sentía abrazarte. Hoy por hoy lo recuerdo y no creo que algo se le pueda comparar. Agradezco que estuviese oscuro cuando tocó decir el adiós definitivo. Besé tu frente, porque no sabía de que otra forma hacerte saber lo mucho que me importabas, que te extrañaría y me preocupabas. Ese fue un "Cuídate por favor, te amo" .
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Querido Krush [✔]
Short StoryTodos hemos tenido que curar un corazón roto alguna vez. A cada persona en este mundo le toca olvidar a alguien que en realidad, no quiere olvidar. Muchos de nosotros hemos pronunciado despedidas que no queríamos ni siquiera imaginar. Peor aún, desh...