The son of the mafia

¿Quien eres?

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Hace poco que me había unido a la mafia, fue por petición de mi madre adoptiva Kouyou que dijo que sería lo mejor ya que así podríamos pasar más tiempo juntos y con mi habilidad me iría muy bien aparte de que ya tenia 17 años y queria mantenerme cerca, al principio tuve mis dudas pero al final acepte, el día que Kouyou y yo fuimos por primera vez a la oficina del jefe para que pudiera conocerle me llamó la atención de que en aquella habitación había un joven más o menos de mi edad con expresión seria y lleno de vendas, la verdad es que no quise darle mucha importancia y cuando salimos de la sala le hablé a Kouyou

Oye ane-san-Dije mientras miraba al suelo

¿Que ocurre querido?-Pregunto de forma tranquila mientas seguía mirando al frente

Quien era aquel chico que se situaba al lado del jefe?-Dije levantando mi rostro para ver a Kouyou, tras eso hubo un minuto de silencio hasta que habló

Has oído hablar sobre el demonio prodigio?-Dijo parándose en seco mirando aún al frente

He podido oír un poco pero no se mucho-Hable mientras me paraba junto a Kouyou

Kouyou soltó un supiro y me miro-El demonio prodigio, también conocido como el hijo de la mafia, fue básicamente criado en estas paredes-Pauso un momento para después seguir hablando-Aquel chico que viste al lado de Mori es el mismo demonio prodigio, y te doy una advertencia no te acerques demasiado a él Chuuya

Tan solo asentí con la cabeza, amo mucho a Kouyou pero no iba a hacerle caso, siento como si ya conociera a aquel chico y necesito saber la razón. Tras esa conversación fui recorriendo la mafia en busca de información sobre es demonio prodigio ya que sabía que Kouyou no me iba a contar nada más, apenas pude enterarme de cosas ya que todos dicen que ese chico es muy misterioso pero lo que están de acuerdo todos es que ese chico no tiene corazón alguno.

Nadie sabe nada más sobre ese demonio prodigio-Dije algo enojado hasta que a lo lejos vi al mismo chico de cabello castaño dirigirse hacia una habitación, decidí seguirle y utilice mi habilidad para que no me viera, al mirar lo único que pude ver es que había entrado a la cocina y se estaba llevando un poco de comida, al ver que iba a salir de nuevo me pegue al techo para que no me viese y lo empecé a seguir con cuidado de que no me descubriese, tras un poco de andar llego a una habitación en la cual había dos niños de cabello negro

Dazai-san ya volvió-Dijo el niño de cabello negro con mechas blancas

¿A donde había ido Dazai-san?-Pregunto curiosa la niña

El de cabello castaño no dijo nada y les extendió unos onigiris-Comanlos-Dijo serio mientras les daba los onigiris a los niños

Gracias Dazai-san-Dijo la niña con entusiasmo mientras agarraba uno de ellos

El chico solo mira a los onigiris con ilusión pero miedo a la vez hasta que el castaño le puso una mano en la cabeza indicándole que comiera y tras unos segundos el chico comenzó a comer. Yo seguía mirando desde el marcó de la puerta escondido hasta que el castaño se volteo para ver y yo me escondí, tras eso tuve que irme para que no me descubriese

Pasaron unas horas y después de volver de una misión fui a buscar a los niños que se encontraban anteriormente con el castaño, tras un rato de búsqueda los encontré en una sala de entrenamiento

Hola-Dije acercándome a ellos

La chica se asustó y se puso detrás del chico el cual se puso a la defensiva-Quien eres y que quieres-Dijo firme sin titubear