Capitulo 4: Shanger, el sujeto cambia formas.

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Ralf habia avanzado una distancia considerada, los árboles de las hojas púrpuras seguian en ilera. Ralf tenía la sensación que no había avanzado tanto, pero eran cuatro horas que llevaba caminando sin descansar, siguió sin voltear a los lados, las horas pasaban y él seguía caminando pensando "ésto no es tan díficil, Lox debio estar bromeando" "Joder esta muy lejos la montaña" "Tengo hambre...mierda, también tengo sed".

Los pensamientos le jugaban en su contra, pues empezó a tener hambre y el sol ya estaba en su punto medio. De pronto de algun lugar se escuchó un grito.

-Ajajajaja- más bien parecía que unos hombres estaban persiguiendo a alguien mientras gritaban- ¡Ven! Estas muerto, maldito fenómeno.

Ralf siguió los gritos y se desvió del camino de los árboles, no caminó mucho, llegó en dos minutos. Habian tres hombres que acorralaban a otro con una vestimenta muy peculiar: las ropas eran de marrón claro, traía collares, muchas cosas gindando y un tatuaje de un sol dorado en la frente.

- ¿Qué te pasa? Ya no eres muy valiente como hace rato- dijo uno de los hombres.

- Todo lo contrario- dijo el sujeto, que no estaba asustado ni nada- yo los quize traer hacia acá.

Los hombres sacaron unos cuchillos de 50 centimetros de largo (casi eran espadas).

- ¡Este es tu fin!- dijo uno, el sujeto sonrió.

- ¡Oigan!- gritó Ralf- no me parece muy justo que tres hombres quieran matar a uno solo y desarmado.

- Chico, por favor no te metas- dijo el sujeto.

Ralf sacó su cuchillo y se puso en guardia.

- Yo lo ayudaré, haber quién gana- dijo Ralf ignorando lo que le habian dicho.

- En serio, no necesito ayuda- replicó el sujeto muy confiado.

Todos ignoraron a Ralf y siguieron con su asunto "bélico".

-Entonces...¡muere!- gritó uno y todos se avalanzaron al hombre de ropajes marrones, Ralf hizo a reaccionar para detenerlos, pero el hombre rapidamente y como si fuese lo más normal de la vida se transformó en una serpiente grande y de un colazo tumbó a todos- ¡Agggg! ¡Ay!- gritaban los hombres.

Un colazo había bastado para dejar dolidos a sus amenazantes, quienes al levantarse se dieron a la fuga. El sujeto se volvió a transformar en una persona tan rápido como lo hizo al convertirse en serpiente. Ralf estaba estático, un poco asombrado, porque él en lugar de los otros hombres pudo haber esquivado el ataque. A pesar de todo le sorprendió la metamorfosis de aquel hombre.

-¿Cómo hiciste eso? ¿qué eres?- preguntó Ralf con mucha curiosidad, aquel hombre sólo estaba serio, no sonreia, pero tampoco parecía mala persona-...¡ oye! ¿No me vas a contestar?

-Haces muchas preguntas, una persona asi podria ser demasiado sabia al ser tan curioso...o hacer que le corten la cabeza por preguntón- dijo aquel.

Ralf permaneció en silencio unos instantes, hasta que por fin pudo decir algunas palabras.

-Tú...tú...¿tú cómo te llamas?- preguntó con inseguridad.

-Yo me llamo Shanger... ¿qué trae a un muchacho a mostrarse por aquí?

-Estoy en entrenamiento, debo seguir los árboles con las hojas de color púrpura- respondió Ralf un poco tenso.

- Tienes suerte... Yo también voy por ahí, no deberias estar en estos lugares tan peligrosos- le dijo Shanger.

-Tú estas en estos lugares peligrosos ¿que no?- le dijo Ralf, pero él quería que le dijera sus razones y Shanger asi lo hizo.

- Yo vivo como a cinco kilometros al Este, pero voy a un torneo que se realiza cada cinco años para elegir el rey del bosque- respondió sinceramente Shanger.

Sangre Kirogha #1: The Warriors Of The ProphecyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora