Tuve mucho tiempo para pensar después de que Jayden se fue, me quedé mirando el techo de la habitación como si en él fuesen a aparecer las respuestas a todas las preguntas que tenía.
Mi vida había dado un giro de 180 grados en los últimos meses, literalmente regresé de la muerte y tenía mil misterios acribillando mi espalda, pero en ese momento solo podía pensar en mis estúpidos sentimientos.
Amé a Jayden, si jamás lo hubiera hecho, no me habría sacrificado por él de la manera en que lo hice o habría pasado meses enteros intentando regresarlo de las garras de los Krisnoff.
Todos sabemos que mi primera y única relación fue terriblemente tóxica, abusiva y violenta. Aiden, mi ex novio, fue la peor persona sobre la faz de la tierra y es algo que debo reconocer.
Me violó más veces de las que pude darme cuenta en su momento, solo hasta que pasó el tiempo caí en cuenta que el abuso siempre estuvo allí, desde el momento en que nos conocimos hasta el día en que murió, tuvo el control absoluto de mi voluntad.
En cambio, con Jayden... Si bien nos habíamos traicionado y hecho muchísimo daño el uno al otro, yo había escogido ceder a él, yo lo besé, yo lo incité a que nos acostáramos, yo le dije que lo amaba.
Yo lo había elegido voluntariamente.
Fue la primera vez que quise a alguien sin que se me lo impusiera y lo idealicé tanto que me aferré a él egoístamente, sin darme cuenta que, los sentimientos fueron cambiando con el paso del tiempo.
Jayden fue un soplo de aire fresco después de estarme ahogando bajo la mano asfixiante de Aiden y siempre le agradeceré por ello.
El momento de soltarlo había llegado, eso era más que claro. Pero... no me sentía lo suficientemente valiente.
Me aterraba la expectativa.
¿Y si nadie llegaba a amarme como él?
¿Y si no volvía a encontrar el amor después de él?
Sabía que había algo en mí que indirectamente se inclinaba de manera natural hacia Axel, pero el sentimiento era tan nuevo e inesperado que me aterraba pensar en las posibilidades.
Jayden era una cosa... Conocía su historia, sus manías, su lado protector, quien fue antes de ser vampiro, sus aspiraciones...
Pero Axel era como un libro con un cerrojo, o bueno, uno no, miles. Una persona como él, tan metódica y manipuladora, tan centrada en el poder... No creía que fuese capaz de sentir.
O dudaba que fuera capaz de sentir algo por mí.
Qué equivocada estaba...
¿Y si solo yo estaba teniendo un pequeño y ridículo flechazo por él?
¿Y si nada más me quería usar por ser la primera en mezclar los linajes Stonem y Chervén?
¿Y si me rompía el corazón?
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Corazón Resiliente #2
FantasyMichelle Howard aborrecía a los vampiros con todo su ser, tenía como objetivo eliminarlos y luchó durante mucho tiempo para conseguirlo... Hasta que, por cosas del destino, se convirtió en una de ellos. Después de una guerra casi interminable, acab...