"La flor de maíz" (H.a.o. // T.N.)

l.-

P.O.V. TN.

-Ehh...

Cada uno los watts con los que esté chico iluminaba la calle gritaban "peligro" para empezar ningún ser humano brillaba y tampoco flotaban sobre el camino sin pisarlo. Apreté al gatito aún más contra mi pecho.

-Un... Fantas...

-Como te atreves a confundir al Dios de este mundo con un simple fantasma?!

"Dios?" Recuerdo haber pensado. "Como un chico de mi edad podría ser Dios? Más aún, como un chico que lucía tan hastiado lo sería? No cabía duda que su kimono lucía caro y estaba impecable y que su melena se antojaba más suave que seda pero eds mirada ..."

-Nah.

- Cómo que no?!! Arrepiente en este instante!!... De hecho deberías haber muerto tan solo por verme!!

-Bueno... N-no quise ofender. Es solo que  no sé que haría Dios en este barrio, buscando gatos en la calle como una dama de los gatos.

-!Iiiiiiih!- Hizo Dios en ese momento- !Voy a reducir tu ser a polvo! Pero antes sabe que no estoy buscando gatos, !ese es mío!

Mire un momento al gatito.

-Puedes probar que es tuyo?

-Que dices?!- Gritó la aparición.

-Cuando lo encontré parecía asustado.

-Pero claro que es mío!... Qué te quedas mirando.

-No estarás pensando en comerlo... Verdad?

Eso fue el colmo para la deidad que tenía enfrente. Pero juro que yo solo quería proteger al gato.

-Escucha retazo humano! Yo soy tu Dios! Soy los mil vientos de la naturaleza! Y el...

Un clima atroz fue desatado e interminables relámpagos empezaron a cruzar el cielo de forma aterradora.

-Estan bien! Te creo! Te creo! Aquí tienes a tu gato.

Solté al animalito que corrió hacia su "dueño"

- Oh Matamune!

La expresión en el rostro del Dios cambió de forma radical. Se volvió tan tranquila y hasta dulce.

-El espíritu de un perro te persiguió? Todo fue por estar distraído con ese mocoso del demonio... Porque dejaste que ese ser tan desagradable te recogiera?...

Justo cuando me estaba retirando en silencio el chico alzó su mirada nuevamente y si él era Dios me miró como si yo fuera el mismísimo diablo.

-No... Murmuró en voz baja. Estás jugando conmigo Matamune!!

Esa mirada fue más de lo que pude resistir. Después de todo estaba frente a una entidad divina. Terminé colapsando junto a los basureros.