Y así fue

One-Shot

Heung-Min camino de un lado a otro inquietó, no quería trasmitirle sus miedos al equipó, el capitán debía mostrarse seguro y confiado. Pero no podía ocultar la ansiedad que le producía salir a la cancha y enfrentar a un digno rival como era el Manchester United, si bien no había buenos antecedentes en los Spurs en las últimas temporadas, quería creer que no iban a sentir la ausencia del gran goleador de la Premier, Harry Kane.

Mentalmente repasó cada jugada, las formaciones de ambos equipos y chequeo en silencio al portero por las dudas, prácticamente todos ellos dependían de que tan bueno fuera ser Vicario si tuviera que enfrentarse a los delanteros del Red Devils.

-Sonny

El nombrado dio media vuelta para encontrarse al vicecapitán con los brazos extendidos, obviamente Cristian se había dado cuenta de sus inseguridades y solo podía darle ánimos de esa única forma por culpa de las cámaras que no le daban un segundo de privacidad.

Como de costumbre recibió su beso en la mejilla derecha, para luego abrazarse fuertemente por un corto lapso.

-Estoy asustado Cuti- murmuró aprovechando de que su rostro no era visible- perder en nuestra propia casa...

- confió en vos, Todo va a estar bien

Fue lo único que atinó a decir el argentino, a Cristian no se le daba muy bien fingir sus sentimientos, cualquiera que prestara un poco de atención se daría cuenta que sus acciones no eran las típicas de un amigo. Muchas veces reaccionaba por instintos y si no fuera por el coreano que pone limite ya lo hubiera besado en medio de la cancha.

Heung-Min se apartó de mala gana, golpeando su pecho amigablemente como si intentará borrar el momento intimo que se había formado alrededor de ellos dos.

Colocando su mejor sonrisa salió al campo de juego, siendo recibido por los aplausos de los aficionados. Ahora que carga con el peso del brazalete podía entender a Harry, varias veces lo había visto llorar a escondidas en los vestuarios y en alguna que otras ocasiones vomitar después de los partidos.

La única diferencia que tiene con su antiguo capitán es que el no está solo, tiene a Cuti. Cualquiera que se atreviera a dudar de su liderazgo tropezaría contra una pared. 

-Chicos nuestro capitán nos dirá unas palabras- Informó Madisson una vez que estaban todos en la ronda-.

- Confío en ustedes chicos, estamos juntos en las buenas y en las malas... somos una familia

-¡vamos!

Los gritos eufóricos le sacaron una verdadera carcajada, no porque se vieran convencidos sino porque en los vestuarios el encargado de motivarlos fue Cuti, un hombre que nació sin sensibilidad cuando se trata de motivar a cualquier ser humano que no sea Son Heung-Min.

Si bien en el primer tiempo se genero una gran polémica debido a que los jugadores del United reclamaron mano de Romero dentro del área, el VAR no consideró que hubo intención, por lo tanto el partido siguió su curso con normalidad.

Al comienzo de la segunda mitad apareció el gol que abriría el marcador, la jugada comenzó con Kulusevski que se metió en el área por la derecha y metió un centro, que aunque rebotó en el palo quedó a los pies de Pape Matar Sarr y este no dudó en darle la primera alegría a los Spurs. Mientras que el segundo llegó con una desafortunada jugada de parte de Lisandro, que al querer despejar terminó dándole fuerzas a la pelota para que entre a su propio arco.

Y para sorpresa de los fanáticos, relatores y hasta el mismo DT, ganaron por dos goles.

Cuti abrazo con cariño a su amigo y compañero de selección al finalizar el partido, la rivalidad entre los jugadores duraba el tiempo que marcaba el reloj del árbitro.