Los miembros del grupo se encontraban charlando sobre el siguiente regreso que harían, planificando y dando avisos. Me encontraba enojado ese día en especial, ¿por qué? Simple, Lee Minho sin prestarme atención cómo se debía. Era su novio, merezco atención. Lee no me quitaba la mirada de encima, sintiendo escalofríos por mi cuerpo, tener su mirada fija en mí era de temer.
Se me ocurrió molestarlo un poco acercándome hacia Hyunjin lentamente, pasando mi brazo por su hombro en forma de abrazo, estuve así interactuando la mayor parte del tiempo, más en esa entrevista donde no parábamos de estar muy cerca. Se notaba en Minho su molestia, cruzándose de brazos y chasqueando su lengua, lo había logrado, había logrado hacerlo enojar. Sonreí con victoria y seguí con mi tentador juego, observaba cómo perdía cada vez más la cordura y la desesperación inundaba ese lugar.
Changbin lo noto y decidió ayudarlo a calmarse, cosa que no funcionó, pero lograba interactuar y olvidarse solo por un par de segundos lo que estaba ocurriendo conmigo.
Iniciamos un juego, ahora jugándomela el doble con Felix, dábamos acercamientos atrevidos cuando teníamos la oportunidad, sin dejar de mirarlo. Sinceramente mirar aquellos penetrantes ojos casi oscuros me enloquecía, me hacía desearlo y tener su contacto, quería que me tocara tanto como me gustaba, sus manos recorriendo cada parte mía, marcando y reclamándome como suyo, de nadie más. Lo era, era suyo.
Pero el día estaría muy ocupado así que tenía con que salirme con la mía, podría divertirme verlo molesto, ver esa urgencia de llevarme y follarme tan duro, cómo me lo merecía.
Y sabía que me llevaría una buena castigada por todo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
