Cuando tenía 18 años tuve el privilegio de trabajar junto al Dr. Mario Federico Bosch en una oficina que atendía casos de empleados provinciales. La oficina estaba al final de un pasillo y tenía una ventana a mi izquierda que daba a la calle. Era habitual ver al Dr. Bosch entrar por la ventana, "me queda más cerca, sino tengo que dar toda la vuelta para entrar". Cierta vez yo estaba apesadumbrado por un problema que en este momento no recuerdo. De joven, tenía la mala costumbre de canalizar mis problemas con cualquiera que tenía a la mano. Ese día, el abogado hizo su entrada de siempre y me saludó con un "¡Hola Martín!, me muero por tomar unos mates, ¿me hacés el favor de calentar agua y yo preparo acá mi mate?"
- De ninguna manera, no es mi trabajo calentarle el agua... -dije. El abogado me quedó mirando un momento y pronunció unas palabras que me dieron una lección valiosísima, una lección que hoy se la voy a regalar.
- ¿Tenés algún problema? -dijo el Dr. Bosch. Yo examiné si la pregunta era agresiva, irónica y no detecté nada. Aun así, no bajé la guardia.
- Sí, ¿y qué? -dije y esperé que el abogado confrontara conmigo. Creo que yo estaba esperando una confrontación con cualquier persona.
- Decime una cosa -dijo Bosch. Yo inflé el pecho para hacer frente al ataque-, ¿yo te puedo ayudar?
Esa actitud me descolocó. Me bajó los pies a la tierra y me hizo saber que podía contar con alguien, con alguien que además nunca fue mi enemigo. Ya lo dije al comienzo del libro, si usted vive a la defensiva, terminará pensando que cada interacción es un ataque. Uno le enseña a los demás cómo quiere que lo traten. El doctor Mario Federico Bosch me enseñó que quería que lo trate como a un aliado nunca como a un enemigo. Antes de evocar su cargo o enojarse, lideró, influyó en mí. Un líder verdadero influye en cada acción, en cada palabra y en cada gesto. Liderar procesos educativos, ¿cómo y por qué hacerlo? Eso es lo que veremos en esta parte.
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El libro de oro del Docente ¡Conviértase en un docente extraordinario!
Non-Fiction¿Te has preguntado alguna vez cómo mantener la atención de tus alumnos o qué hacer cuando parece que nadie valora tu esfuerzo como docente? Usted no está solo. En este libro, lo invito a un viaje donde no solo encontrará respuestas a esas preguntas...
