𝐆𝐇𝐎𝐒𝐓 𝐑𝐈𝐋𝐄𝐘 - One-Shot

O1

𝐒𝐈𝐌𝐎𝐍 𝐑𝐈𝐋𝐄𝐘 × 𝐅𝐄𝐌 𝐎𝐂!

"That idiot?"

NSFW

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Estabas casada con König, siempre pensaste que él sería el amor de tu vida, pero no fue así.

Las discusiones te comían la mente diariamente, y la ausencia de tu esposo por su trabajo sólo empeoraba las cosas.

-

¡Por Dios, mujer, sólo estás haciendo una escena de dramatismo! - König dijo, te negabas a mirarlo ya que tus ojos presentaban lágrimas.

- ¿Escena? ¿¡De dramatismo!? Tu puta madre hace escenas de dramatismo - Dijiste, cegada por la ira le tiraste un florero.

- Olvidaste el aniversario... ¿Verdad? - Tu voz apenas era un susurro, veías cansada a tu esposo - Lo olvidaste, de nuevo.

- No, no, no... Mi amor, no quería hacerlo, últimamente las misiones han puesto mucha presión y... - No le diste tiempo de terminar lo que quería decir, te levantaste de esa silla de mala manera y te encerraste en su habitación de un gran portazo.

- Olvida eso, mi vida... Sólo déjalo atrás, tal vez esto te hará sentir mucho, mucho mejor... - Ghost susurró, sacando suavemente tu blusa para tocar tu piel

- ¿Cuántas veces te lo he dicho, uhm? Él no te quiere como yo, nunca en su vida te deseará como yo...

Tu vista se nublaba por la excitación. De nuevos habías tenido una pelea con König y corriste a los brazos de tu amante. Ghost sabía perfectamente que estabas casada, pero ni siquiera le importaba, de hecho le daba igual la presencia del hombre cuando lo observaba en la base, pero cada vez que lo veía se ponía a pensar en cómo estaba desaprovechando a la tremenda mujer que tenía a su lado.

- Será mejor que me respondas, mi niña... ¿Cuántas veces te he dicho que te alejes de él? - Sus fuertes manos se encargaban de acariciarte, la ropa de ambos estaba esparcida por el suelo despreocupadamente.

Lo viste encima de ti, una de sus manos buscaba algo en su cajón mientras que con la otra acariciaba tu mejilla suavemente. Una sonrisita astuta se mantuvo en los labios de Ghost cuando encontró el condón.

- Dime... ¿Él te toma tan bien como yo? - Negaste de inmediato, sintiendo como dejaba besos en tu cuello haciéndote suspirar.

Su gran longitud entró delicadamente en ti, dándote el tiempo que quisieras para acostumbrarte. Acariciaba con cuidado tu cabello, y una vez que diste una silenciosa señal, Ghost comenzó a moverse.

- Tus ojos son como el jodido cielo... ¿Cómo es posible... Cómo es posible que ese estúpido sólo te haga llorar se tristeza?- Ghost murmuro con un leve enojo, sus suaves embestidas te hacían olvidar absolutamente todo.

- G-Ghost... - Dijiste, el hombre rió entre dientes antes de acelerar su ritmo, los gemidos escapaban de tu garganta con felicidad - Shhh... ¿O acaso quieres que tu esposo escuche cómo te puedo dar lo que a él le da tanta problemática?

Las palabras no eran capaces de salir de tus labios, la sensación de él entrando y saliendo era suficiente para volverte loca.

- Oh... Justo ahí, mi amor... - Tu susurro lo hizo sonreír, su gran mano seguía acariciando tu mejilla.

- Por supuesto que te gusta, te gusta que te den el placer que ese idiota no es capaz de darte...

Tus paredes apretaban el miembro de Ghost, tu segundo orgasmo en la noche se acercaba. Agradeciste que Ghost estaba cansado, porque normalmente no paraba hasta que daban las cuatro de la mañana. Una vez que los dos llegaron al clímax él se movió por unos momentos más, para luego botar el condón al tacho.

- Lo hiciste excelente, mi niña. Ahora, vamos a darte un baño, ¿si? - Te cargó en sus brazos como si nada, llevándote a la bañera de su habitación.

- Te quedarás toda la noche conmigo, y no, no voy a aceptar una negativa por tu parte, cariño - Él susurró, sonriendo levemente mientras masajeaba tu cabello con shampoo con delicadeza extrema.