Capítulo 25: El partido final

320 36 2
                                    

—¡Y DEL LADO DERECHO, TENEMOS A NUESTRO DESAFÍO, EL LEGENDARIO HÉROE DE LA ESPADA, EMIYA SHIROU! ¡LLEGÓ TAN REPENTINAMENTE COMO EL VIENTO DEL NORTE, Y TOMÓ TODO EL TORNEO POR TORMENTA! ¡NO ES EXTRAÑO LLAMARLO EL TORNADO ROJO DE ZELTOBLE!

Desde la puerta del lado derecho del estadio, EMIYA salió espada en mano. Los aplausos surgieron de todos los rincones del coliseo cuando apareció a la vista.

Pero odiaba esto. Detestaba este tipo de peleas por placer carnal, y escuchar a esas personas sedientas de sangre animándolo así lo hacía sentir incómodo. Le hizo sentir como si estuviera en connivencia con ellos.

Y el apodo de "Tornado Rojo de Zeltoble"... Temblaba de disgusto al pensar en ello. Nunca tuvo intención de convertirse en una leyenda del coliseo ni nada por el estilo. Escuchar cosas así a su alrededor lo asustaba más que cualquier enemigo al que tuviera que enfrentarse.

Al otro lado de la arena, el Capitán Fargus, el Héroe del Hacha, aparecía a la vista desde el túnel opuesto.

—¡Y AHORA, DEL LADO IZQUIERDO, TENEMOS A NUESTRO CAMPEÓN INVICTO, EL HÉROE DEL HACHA DE SIETE ESTRELLAS, EL HONORABLE CAPITÁN DEL ARCA, EL CAPITÁN FARGUS! DURANTE UNA DÉCADA ENTERA, NO HA HABIDO NINGÚN SER EN ESTE MUNDO QUE PUDIERA AMENAZAR SU TRONO COMO CAMPEÓN DEL GRAN TORNEO DE ZELTOBLE, PERO ESTE AÑO HA APARECIDO EL RETADOR MÁS PROMETEDOR, ¿VA A PODER DEFENDER SU POSICIÓN DE HÉROE INVENCIBLE O VAMOS A TENER UNA NUEVA PERSONA PARA LLEVAR EL CINTURÓN DE GRAN CAMPEÓN?

Hoy Fargus se vistió diferente a lo que había estado haciendo los días anteriores. En lugar de simplemente una camiseta sin mangas normal y un par de pantalones, hoy llevaba una armadura con peto de acero y hombreras. El Hacha de Siete Estrellas en su hombro tomaba la forma de un hacha de batalla de dos manos con dos hojas curvas decoradas con una cabeza de león mordiendo la joya verde característica del arma legendaria. Parecía alguien que se había estado preparando para librar una guerra.

Los dos luchadores se enfrentaron en el centro de la arena. Los ojos grises de EMIYA miraron fijamente los ojos ámbar del Capitán.

—Pareces demasiado preparado para alguien que busca una buena pelea —señaló el Héroe de la Espada. El Héroe del Hacha le respondió con una sonrisa.

—Larsazusa es una de las luchadoras más poderosas que esta tierra jamás haya tenido. Viendo cómo luchaste y la derrotaste tan a fondo ayer, sólo un tonto vendría a esta pelea sin estar preparado.

Los dos héroes siguieron mirándose fijamente durante un rato. Luego, fue el propio Fargus quien alzó la voz a continuación.

—¿Como están los niños?

—A salvo —respondió EMIYA secamente. El Héroe del Hacha se rió entre dientes.

—Ya veo. Es bueno saber que están en buenas manos. Ese chico hakuko es un buen chico.

El alcalde y comentarista Damian Kaur entró en la arena. Se detuvo donde estaban los dos luchadores.

—¿Están listos los dos luchadores?

EMIYA asintió.

—Estoy listo.

Fargus también sonrió.

—Siempre estoy más que listo. Sin embargo...

Kaur miró al Héroe del Hacha.

—¿Pasa algo malo, Capitán?

La sonrisa en el rostro de Fargus se hizo más amplia.

—Ah, nada. Sólo te lo advierto, mejor prepara las barreras. Hoy voy a dar todo.

𝑻𝒉𝒆 𝑹𝒆𝒃𝒊𝒓𝒕𝒉 𝒐𝒇 𝒂 𝑺𝒘𝒐𝒓𝒅 𝑯𝒆𝒓𝒐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora