Conquista

La colonizacion

Era una mañana muy triste, el cielo lo indicaba, la familia azteca miraba hacia la playa, esperando pacientemente a que los hechos que sus dioses repetidamente les habían señalado que sucederian sucedieran, la inpotencia en el chiquillo se mostraba atravez de su rostro, pero como su madre lo había dicho "No hay fuerza en la tierra que pueda competir contra los presagios de los dioses, solo podemos esperar"

-¿Realmente esta pasando?

-Si... los dioses lo predijeron

-No podré salvar a mi madre ¿Verdad?

-No

-Tranquilo hijo... al final, ese es el destino que debo asumir. Y realmente no me arrepiento de nada

-Me dejaras solo

-Bueno... entonces eso será de lo único que me arrepiento, pero solo un poco. Recuerda que soy egoísta, quizás así no te sientas tan mal

-No lo necesito ya que no siento culpa. Los dioses an dado sus razones. Moctezuma ¿Que prosigue?

-Esperar a que todo se caiga a pedazos,y resar por que sigas vivo al final de la masacre.

Poco tiempo después

-Bienvenido España

-Azteca... Amor mio

-Tranquilo, se que lo tienes que hacer

-Lo lamento -dijo apuntando con su arma a aquella mujer, a la que le había entregado su corazón, su vida y sus sueños- No quiero hacerlo

-Si es por el bien de nuestro hijo. Esta bien, solo te pido... cuídalo... no lo abandones

-Lo prometo

-Y una cosa más -Dijo con la mirada cansada, sintiendo como sus lágrimas se salían de sus ojos, deslizándose por todo su rostro mientras miraba el piso.-

-ESPAÑA APRESURATE

-Que sea rápido cariño

-Te amo -dijo llorando haciendo llorar tambien al hombre frente suyo-

Un disparo, fue todo lo que se escucho, fue todo lo que el pequeño de solo 12 años pudo ver antes de ver a su madre desplomandose en el suelo, con un agujero en la frente. El niño se aguanto las lágrimas mientras huía por el bosque hacia el norte, todo se saldría de control y el hecho de que España tuviera la ayuda de su tío Tlaxcalteca no ayudaba mucho, corrió en búsqueda de ayuda de su tía teotihuacan para escapar juntos al territorio de su amiga la cultura mogollona, la cual los ayudaría a resguardarse.

Apesar de que el joven chico sabia que hiba a pasar, después de que los esclavisaran nada era realmente concreto, se sentia aterrado y ese terror solo cresio cuando miró la casa de su tía hecha senisas

-¡¡No!! ¡TIA!, que alguien haga algo dios ah! -se le ocurrió una idea, extendió sus alas mientras volaba hacia el lago con un hechizo simple que le habían enseñado las tlahuepuchis para haci poder levar el agua con el -

Logro apagar el incendio, por desgracia al entrar solo pudo ver el cuerpo calcinado de su tía, se sintió incompetente, vacío, desesperado. Pero no era momento de derrumbarse, aún debía llegar a donde la amiga de su tía, por ende la sujeto cargandola mientras volaba lo más rápido que podía para llegar a donde se encontraba el otro pueblo indígena