🎶Ven aquí, soy tu paraíso
No puedes cerrar tus ojos
Aunque pelees, ya no importará
No me rechaces.
Solo cierra tus ojos y escucha atentamente
Sigue el sonido de la flauta, sigue esta canción
Aunque suene un poco peligroso, soy muy dulce
Estoy aquí...
Llevaba muchas bolsas en mis manos al punto que pesaban. Había caminado como por 10 minutos y mis manos estaban marcadas por sostener dichas bolsas que contenían verduras y frutas ya que eran encargo de mis padres.
Era hija única y vivía con mis padres a pesar de tener 20 años, aún seguía viviendo bajo su techo, pues en el pueblo de Hamelín muchas a mi edad ya estaban casadas, con novio o con hijos, pero yo aún decidía vivir mi vida de soltería.
El sol estaba algo fuerte y me detengo en un árbol frondoso y alto donde se formaba una sombra y descanse sentándome un momento.
Pero cuánta calor hace hoy - Dije pasando la manga de mi blusa por mi rostro.
Espere unos momentos y tome nuevamente camino pues se que mis padres deben estar esperándome. En parte me alegraba ser hija única pero por otra no. Como en estos momentos si tuviera un hermano o hermana me hubiese acompañado cargando algunas bolsas, así no me cansaría tan rápido.
Había llegado al fin a casa siendo recibida por la hermosa sonrisa de mi madre donde cocinaba el almuerzo.
Pensé que nunca llegarías hija - Exclama, donde me voy acercando y dejó las bolsas en la mesa.
Tuve que hacer ciertas paradas mamá, estás bolsas pesaban mucho - Le mostré mis manos rojas y marcadas por las líneas que se formaron por la presión de estas.
Hay no mi cielo, mira tus manos. Déjame ponerte una pomada - Sale de la cocina para dirigirse a la habitación y buscar en su armario una pomada donde yo le llamo "la milagrosa".
Ven acércate y siéntate aquí - Extiendo mis manos a su dirección y empieza aplicando en las zonas rojas-
No se qué tiene ese pomada pero en verdad que es milagrosa. Para mañana estoy segura ya no tendré nada - Le dije sonriente.
Lo sé y casi no hay mucha por cierto. Le diré a tu padre que compre más - Termina de aplicarme la pomada y se levanta a dejarlo donde estaba para luego lavarse las manos y dirigirse a la cocina para terminar el almuerzo.
Por cierto, ¿Papá aún no llega? - Pregunté ya que cuando llegue no lo vi.
No aún está trabajando con el señor Ham pero no tardará en llegar - Ascendí con mi cabeza diciendo un está bien.
Colocaba los 3 platos en la mesa junto con los cubiertos para la comida. Mi madre se aproxima dejando en medio de la mesa la olla de estofado el cual olía muy rico. Cuando servía los vasos la puerta de la casa se abre donde ambas miramos ingresar a mi padre.
Pero que delicioso aroma siente mi nariz - Dijo acercándose hacia donde estábamos saludo a mamá con un beso en sus labios y luego me saludo a mi con una beso en la mejilla y nos sentamos ya a comer.
Siempre he dicho que tu madre es la mejor cocinera - Expreso mi padre con una sonrisa.
Se que lo es, y trato de aprender sus recetas culinarias - Exclame masticando un poco.
Como te fue hoy cariño, ¿Ya terminaron el trabajo? - Pregunto mi madre, ya que mi padre era un supervisor de obras y estaba haciendo unas reparaciones en una de las casas muy lujosas del pueblo.
Pues dentro de dos días aproximó que habremos terminado- Dijo bebiendo el ponche.
Así pasamos un buen momento familiar donde al terminar mi padre salió nuevamente para terminar el trabajo, mi madre se fue a la tienda que tenemos en el pueblo de ropa que ella misma confeccionaba y yo pues me disponía a estudiar lenguas.
Llegando la noche como es costumbre me toca hacer la cena pues llego más temprano que todos.
Al paso de una hora llegan mis padres para sentarnos a cenar como familia. Compartimos un momento ameno para luego después de terminar nos preparamos para descansar y recobrar energías para el día siguiente.
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