🎶Ven aquí, soy tu paraíso
No puedes cerrar tus ojos
Aunque pelees, ya no importará
No me rechaces.
Solo cierra tus ojos y escucha atentamente
Sigue el sonido de la flauta, sigue esta canción
Aunque suene un poco peligroso, soy muy dulce
Estoy aquí...
Caminaba hacia una de las casas donde me habían llamado pues había una persona que había perdido a su esposa e hijos donde murieron a manos de delincuentes y tanto era el dolor de este hombre que me pidió ayuda para olvidar ese trágico recuerdo y empezar de nuevo.
Debe ser aquí - Digo para mí mismo susurrando. Pues había llegado a un pueblo llamado Hamelín.
Había escuchado de el. Sus costumbres, tradiciones, las personas que vivían ahí. A decir verdad no era un mal pueblo para vivir si es lo que buscas pero en mi caso solo iba de pasada.
Me acerco a la puerta de la casa y tocó unas dos veces donde a los segundos escucho pasos y la puerta ser abierta.
Buenas tardes ¿Usted es el señor Harrison? - Pregunté viendo al hombre de unos 35 años.
Si soy yo, usted es el curandero Jeon - Dijo, pues casi no me gustaba ser llamado flautista por los antecedentes que tenía mi familia. Así que cuando me buscaban les decía que era el "Curandero".
Así es - Exclame
Por favor pase - Me dijo abriendo un poco más la puerta para que pudiera entrar. Me indico por señas que me sentará en un sofá algo desgastado. El se sentó frente a mi en otro sofá así que me dispuse hablar pues en cierto punto me incomodaba estar cerca de personas.
Bien señor Harrison, ¿Está seguro de lo que quiere hacer? Porque una vez empiece no habrá vuelta atrás - Le comenté
Dio un suspiro donde hablo con su voz entrecortada.
He pasado estos dos meses en un tormento hasta el punto que mi corazón no resiste vivir y ese dolor en mi pecho que me abruma cada día por ese tormentoso recuerdo no me deja avanzar. - Dijo mirando hacia abajo donde veía como algunas lágrimas brotaban de sus ojos deslizándose por la mejillas. - Así que si, estoy muy seguro de lo que haré -
Lo escuché y pareciera que sufría mucho.
Realmente si una persona mentía mi flauta me hacia sentir conexión con la persona al momento que la tocaba y la melodía de la flauta para el oído de la persona no era dulce sino una molestia que atormentaba aún más el suceso traumático de la persona y en vez de olvidar le hacía más énfasis.
Bien, entonces escuché atentamente.- Le indique - Necesito este lo más cómodo que pueda. Antes de empezar, quiero que recuerde en como sucedió el recuerdo que quiere olvidar. Parecerá contradictorio pero así funciona. - Le dije.
Si es algo contradictorio y recordar sería como abrir esa herida. ¿Está seguro que me hará olvidar? - Sabía que estaba algo inseguro pero así funcionaba esto.
La melodía de la flauta hará su trabajo, una vez que usted termine de visualizar lo sucedido, concéntrese en la melodía. - Termine de decir. -
El pago será al finalizar el trabajo verdad o ¿quiere que se lo de antes?-
Como usted guste, pero en lo personal puede ser mitad antes y la otra mitad al finalizar- Comenté
El señor se levantó fue hasta su habitación y a los minutos regreso con una bolsa algo grande.
Le daré pago completo, porque confío en usted - Me indico mirándome fijo y extendiéndome la bolsa.
Bueno en ese caso, gracias. - Agradecí - Porfavor siéntese para que podamos empezar -
Dio un suspiro algo cansado y se acomodó en el sofá, mientras sacaba la flauta y me ponía de pie. Mire hacia su dirección haciendo una señal con mi cabeza de que ya empezaría.
Cierre los ojos y como le comenté piense de nuevo en ese día y cuando termine de visualizar déjese llevar por la melodía. - Le indique.
El cerro sus ojos y se acomodó en el sofá. Acomode la flauta llevando la boquilla a mi boca y los dedos en los agujeros de la flauta. Cerré los ojos para empezar a tocar aquella melodía dulce. La flauta me transmitía que el hombre realmente quería olvidar ese momento así que pasado unos minutos, veo que se mueve inquieto, el sudor deslizaba por su frente y apretaba con fuerza la tela del sofá, cambie la melodía y el ritmo un poco más rápido donde el hombre empezó a relajarse y pareciera dormido pero no.
La flauta al parecer había hecho su efecto donde la persona queda como en un limbo y aquí es donde termino mi trabajo.
Me acerco al hombre susurrándole un nuevo recuerdo y tocó una nota para que despierte. Este abre los ojos al momento que termine de tocar. Visualiza el lugar y sus ojos caen en mi.
¿Curandero Jeon? - Expresaba con cierta sorpresa - Disculpe, me siento algo cansado de repente pero ¿gusta tomar algo?, por lo que veo no le he ofrecido nada. - Dijo con pena y obvio no recordando lo que había sucedido antes.
En verdad hubiera aceptado esa invitación pero ya me había pagado así que no tenía nada más que hacer.
No se preocupe solo vine de pasada. Si me disculpa - Dije parándome y tomando mis cosas - Debo irme, es algo tarde.
Oh claro, y gracias por.. - Dijo pensativo - Bueno gracias por venir - Hablo con aire pensativo. Yo solo me dirigí a la puerta seguido de el. Nos despedimos e inicie camino para mi hogar donde me esperaba mi hermoso Bam.
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