🪻Capítulo 58🪻

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Ojos brillando como si estuvieran llenos de una niebla negra y una sonrisa siniestra. No era la habitual expresión fría e indiferente de Oried.

«¿Q-Qué pasa?»

No pude evitar estremecerme un poco al mirar la sonrisa de Oried.

—...

Meinhardt no respondió, así que lo miré frustrada y luego volví a mirar a Oried.

Hicimos contacto visual de inmediato, y él ladeó la cabeza como si hubiera pensado en algo.

—[Eres la elementalista que recibió la bendición de Oried] —dijo sonriendo siniestramente.

—¿...?

¿Por qué hablaba en tercera persona? ¿Qué pasaba realmente con Oried? ¿Tal vez solo se trataba de una ilusión? ¿Un ser malvado se encontraba imitando la apariencia de Oried?

Fruncí el ceño.

*¡Qwaanng!*

El techo, que ya se había derrumbado y parecía estar en ruinas, se hizo añicos por completo.

*¡VROAAAA!*

Un gigante hecho de tierra, cuyo tamaño total ni siquiera podía caber por el techo derrumbado, cayó sin más.

«¡Qué demonios es eso!»

¿Un gigante zombi de tierra?

—Es arcilla —dijo Meinhardt con una expresión calmada mientras miraba al gigante.

El gigante de arcilla de grotesca forma humana, que parecía ser hecho a partir de la recolección y amasado de tierra, tenía agujeros negros en su cara como si simularan ser sus ojos, nariz y boca.

—¡¿Eh?!

«Si se trata de arcilla... Mierda.»

Mordí mi labio inferior al recordar la forma de los espíritus superiores de tierra que había visto en el libro de texto que me dio el Conde Eupus.

—Por qué está aquí un espíritu superior de la tierra... No puede ser posible —murmuré sin comprender y levanté la cabeza.

La existencia con la forma de Oried me miró mientras sonreía brillantemente como si estuviera disfrutando de la situación.

—Cierra los ojos.

Mientras miraba fijamente a Oried sin comprender la situación, Meinhardt habló apresuradamente.

—¿Qué? ¿Por qué?

No había tiempo para dudar.

*¡VROAAAA!*

El gigante comenzó a amenazarnos, removiendo el interior en ruinas de la mansión con sus enormes manos.

*¡VROAAAA!*

Meinhardt me abrazó y se concentró por completo en contrarrestar al ataque del gigante de arcilla.

Estaba devastada entre los brazos de Meinhardt, incapaz de aceptar la situación de que me atacara un espíritu superior de tierra que seguía a Oried.

Solo había una verdad en este momento, y era que... Oried estaba moviendo a sus seguidores para atacarme. Entonces, esto significaba que la existencia frente a mí no era un ser con la apariencia de Oried, sino que era el mismo Oried.

¿Por qué?

¿Por qué?

A pesar de que me dijo que me vengara y que podría usarlo para mi objetivo, ¿por qué me hacía esto?

Nacida como la hija oculta del protagonista masculino y la villanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora