Solo Una Noche (DekuKatsu)

Capítulo 11

Cualquiera pensaría que me he vuelto loco por no dejar que las cosas lleguen a más.

Cualquiera pensaría que de Yami haberme dado tan duro por atrás me ha hecho perder la razón por rechazar tan atractivo hombre y a la vez tan buena persona, cualquiera mataría por estar en mis zapatos teniendo a tan amable ser como lo es Eijiro.

Pero es por lo mismo que lo rechazo, ese es el punto por el que no le puedo responder, es porque es una de las mejores personas que conozco, por ende no puedo darle lo que me pide pues él merece a alguien que lo quiera de verdad y aunque quiera hacerlo no puedo, en el corazón uno no manda y hasta no estar seguro de lo que quiero de verdad en la vida, de quien quiero a mi lado, no pienso engañarlo pues no se lo merece, no sé merece que jueguen con él.

Además que solo sexo con él no puedo tener, no soy tan puto de jugar con sus sentimientos cuando los míos aún se encuentran un poco turbulentos por lo que despierta en mí Yami, un poco revueltos.

No sé qué es lo que quiero.

Bueno sí sé lo que quiero...

Quiero un amor que me consuma, que me haga sentir vivo, que le otorgue adrenalina a mi aburrida vida.

Me aferro a mi mochila otorgándome fuerzas para no volver a besar esos carnosos labios enrojecidos y entreabiertos que con su aliento me roba el mío al dar de manera perfecta a mis labios que se encuentran en el mismo estado que los de él.

- Lo siento.

Cuando me pide perdón me siento aún peor al ver sus ojos rojos un poco apagados, un poco avergonzados, un poco desanimados.

Con solo un poco de brillo.

La gente a nuestras espaldas nos observa murmurando cosas que sencillamente a ambos no nos importa, no nos importa lo que piensen de nosotros, uno es libre de amar.

Su mano acaricia mi mejilla regalándome una sonrisa torcida, haciendo que me sienta un poco pequeño ante tan imponente hombre que derrama por los poros sensualidad y a la vez ternura .

-Perdóname por confundir las cosas, es solo que me deje llevar por todo.

Se sigue disculpando, se sigue disculpando como si él hubiera cometido algún error causando que yo sienta más mierda por dejarme llevar.

- Es que eres toda una tentación.

Me uno a la carcajada que suelta un poco nervioso, desesperado con romper de una manera rápida y efectiva con este momento que se ha tensado, que yo lo he tensado al responderle al beso pero sencillamente me deje llevar, como ya he dicho.

Deje que sus labios marcasen el desconocido camino, un oscuro y desconocido camino, pero no puedo permitirme que esto llegue a la cama pues eso sería el más grande error que cometería al jugar con él, no soy de esa clase de personas y no me pienso convertirme en alguien así para alegrarlo, para darle un poco de placer y luego dejarlo desnudo, bajo las sabanas cubriendo su cuerpo bien tonificado desnudo y con una gran confusión, no quiero y no pienso dañar lo que hay entre los dos.

Está linda amistad tendrá que seguir así hasta que sepa que hacer, hasta que sepa que es lo que quiero en mi vida.

Ojala no sea demasiado tarde para cuando decida.

¿La perversión o el amor?

¿Yamikumo o Eijiro?

¿El fogoso amante o el tierno novio?

Una muy difícil decisión.

Niego con la cabeza reposando mis manos en sus hombros, acariciando su chaqueta negra que lo protege del aire helado que corre a estas horas de la noche.