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05:30 am

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05:30 am.

El sonido de la alarma, lo despierta. Se toma unos segundos para repasar su agenda, mientras su cuerpo se acostumbra a dejar el sueño.

Entrenar y visitar a sus padres. Bueno, al menos tiene una actividad más de la normal.

Su vida es bastante monótona, podría decirse, hasta aburrida, si no se toma en cuenta que pasa la mayor parte de su día soltando golpes e intentando no recibirlos. Cada día es lo mismo, se prepara el mismo batido, y utiliza la misma ruta para dirigirse al gimnasio y la misma para regresar a su casa.

Las únicas oportunidades para romper su patrón, las usa para hacer voluntariado y dar un paseo al mismo lugar.

Su lugar especial.

En donde solo es Jeon Jungkook, el omega que le gusta pintar y las cosas dulces; y no, el rudo omega dominante, antipático y arrogante del que a la prensa tanto le gusta publicar artículos, des meritando su esfuerzo, solo por su casta.

Boxear siendo omega, es un reto que quiebra a quien lo intenta; porque, simplemente, no puede actuar como omega. No lucir lindo, adorable, o gustar de cosas que estereotipan a su casta, como querer cachorros. No los dejan querer una familia. Apenas tiene 23 años, pero sabe que, si quiere formar una familia, tiene que renunciar al sueño que tanto le ha costado alcanzar.

Y él, no está dispuesto a hacerlo.

Le toma cuarenta minutos en asearse y preparar su desayuno, más tiempo de lo normal por culpa de un inconveniente del día anterior. Hace un poco de presión con su mano izquierda a su hombro derecho, tratando de aliviar el dolor con pequeños masajes; el médico le aseguro que todo se encontraba en orden, que el malestar se iría al siguiente día, si ya no lo forzaba. Tuvo que detener su entrenamiento, prefería pausar por unas horas a atrasarse por días.

Estúpido, Changbin y su "enfrentamiento de juego".

Un problema que, si bien, para él no es tanto lío, si le afecta, es que no tiene entrenadores omegas. Sus entrenadores son alfas, con el doble de su tamaño y con el doble de su fuerza. Agradece que no lo traten más delicado solo por ser omega, pero para los entrenamientos, tiene que esforzarse el doble para igualarlos.

Jeon Jungkook, es el actual campeón en su categoría de peso y género secundario en Corea del Sur, pero no desea quedarse solo con ese título. Quiere escalar más. Mucho más.

Entra al ascensor que conecta directamente con su apartamento al garaje subterráneo, poniendo la clave al salir. Es una de las cosas que más le gustan de ese edificio, la seguridad. No solo peligra por ser una figura pública, el hecho de que también sea omega y toda la población lo sepa, requiere ciertos cuidados extras.

Un escalofrío le atraviesa su espina dorsal solo con recordar todo el acoso que sufrió al inicio por su cuerpo. Y ahora que su musculatura está bien trabajada, tiene que cuidarse por su olor. Los supresores son sus mejores amigos desde los 15 años.

Dangerous Flower - VkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora