Trabajo de verano: Stan y T/N

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Las vacaciones de verano en South Park son una mierda y todo el mundo lo sabe.

Por eso, este año a los padres de T/N se les ha ocurrido la idea de marcharse de vacaciones, lo que es genial. O lo sería si, claro, no hubieran decidido dejar a su hija en casa para disfrutar de ese crucero romántico de parejas.

-T/N, ¿recuerdas todo? ¿La llave de repuesto por si pierdes la llave de casa? ¿El número del cerrajero por si pierdes la llave de repuesto? ¿El teléfono de la comisaría local? ¿El de la policía del pueblo de al lado por si los policías de South Park son tan incompetentes como siempre?

Suspiro y me hundo en el sofá delante del televisor, agotada por haber respondido a las mismas preguntas hace cinco minutos y otra vez hace diez y otra vez hace quince.
Creo que mis padres se piensan que soy una celebridad en el instituto o algo así y que voy a montar una fiesta en cuanto pongan un pie fuera de casa. Si no no entiendo por qué han dejado anotado el teléfono de los bomberos como si fuera a quemarles la casa...

-Sí, mamá, todo está controlado. -Respondo en el teléfono mientras paso de un canal a otro, sin mucho éxito. -Sabéis, soy una persona más responsable de lo que os creéis. Aún no he matado de sed a las plantas del jardín.
Sonrío un poco y dejó el control remoto de la televisión a un lado.

-Lo sabemos, lo sabemos... Solamente nos preocupa que te pueda pasar algo malo cuando no estamos. -Subo el volumen de la televisión. Es un canal donde reproducen videos musicales viejos que resulta bastante entretenido. -¿Qué es eso? ¿No estarás todavía en casa viendo la televisión, verdad?

Me congelo. No sé que decir y aunque durante un milisegundo pienso en decir la verdad, recuerdo por qué se supone que no debería estar en casa viendo la televisión y solo puedo murmurar un "joder" que espero que mi madre no haya oído.

-Claro que no, claro que no. Ya estoy de camino al trabajo, solo ha pasado un coche con música muy alta por la carretera a mi lado...

Mientras hablo, me incorporo de un salto y comienzo a correr a mi dormitorio mientras comienzo a desnudarme para buscar algo de ropa que ponerme en mi primer día de trabajo al que, como no, llego tarde.

Antes de terminar la llamada con mi madre, que no parece muy convencida, yo ya estoy pedaleando en mi bicicleta lo más rápido que puedo hacia la granja Tegridy.

(...)

Mientras camino a paso acelerado hacia el granero, compruebo mi aspecto en la cámara del teléfono, temiendo que la carrera en bicicleta hubiera desordenado mi cabello más de lo aceptable.

Y supongo que es por eso por lo que termino chocando contra alguien y cayendo de espaldas justo en mitad de un charco de barro. ¿Lo peor? Tanto el desconocido como mi teléfono terminan enterrado en la masa marrón.

-Oh, mierda... -Murmuro mientras me llevo la mano a la espalda baja, entrecerrando los ojos por el dolor y con el ceño fruncido.

-¿T/N? -Me muero de verguenza cuando abro los ojos para comprovar que es Stan Marsh contra quien me he chocado y quien ahora me mira con una ceja alzada.

Para aquellos que no sepan quién es Stan, bueno, no podría terminar de hablar nunca si empezara. Así que os basta saber que Stanley Marsh es el hijo de mi jefe, propietario de esta misma granja y, oh, sí, seguramente el chico por el que he estado enamorada los últimos dos cursos.

-Uh...-Intento sonreír, algo incómoda. -Hola.
Y no sé por qué pero le tiendo la mano. Sí. Como si estuvieramos en el siglo pasado...
Por favor que alguien me mate ahora mismo...

Pero entonces, Stan sonríe, como si se sintiera mal por que esta sea mi primera impresión en mi nuevo trabajo. Y me devuelve el apretón de manos.

-Mi padre me ha dicho que hoy empezaría a trabajar alguien pero no sabía que fueras tú.
Espera un momento, ¿Stan me conocía? Quiero decir, no habíamos hablado demasiadas veces y era el tipo de persona que prefería pasar el tiempo sola o con Kyle, su mejor amigo, y aún así... Aún así recordaba cómo me llamaba.

Capítulos perdidos (One Shots +18 South Park)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora