29. The siren with flowers

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Hongjoong parece dormir y nada más. Tendido en la cama que Seonghwa preparó para él. Su cuerpo se ha hinchado un poco, pero nada que sea preocupante. Le cambio la ropa, lo arregló un poco y voíla, perfectamente colocado. Es consciente de que se empezará a descomponer eventualmente, pero qué más da.

—Ummmm... Deberías ponerlo lejos, antes de que empiece a soltar agua asquerosa. —propone Jimin, asomado por la ventana

—Lo haré en un par de días. Cuando empiece a hincharse.

—Ummm... Alguien está demasiado enamorado para su propio bien—tararea Jimin con las manos en las mejillas y una sonrisa—. ¿Se lo comentaste a papá? Sabes cuánto ama complacerte.

—Sí. Se lo conté.

—Entonces mi trabajo aquí está hecho.

Despide lanzando un beso y sigue con su camino. Seonghwa se percata de que lleva a alguien o algo, mejor dicho. Un cadáver. Se pregunta cuál de todas las gemas en el collar de Jimin, es ese invitado misterioso.

~ * * * ~

— ¿Falleció? ¿De qué forma falleció? ¿En qué momento?

La llamada a Changbin para preguntar por Hongjoong trae un resultado nefasto. El hombre niega por su parte, teniendo gesto desolado y deprimido en la video llamada que realiza el rey de la Atlántida.

—Hizo un viaje y el barco de hundió hasta el final en esa zona—explica Changbin—. Lamento mucho tener que darle esta noticia. Lastimosamente no estaba en mi lugar invitar personas a su funeral. Sus padres no me dejaron asistir.

— ¿Por qué? —A Soobin ya todo lo toma por demasiada sorpresa como para seguir en confusión.

Desde que regreso de la Atlántida estuvo muy mal de salud. Dieron por sentada mi culpa por enviarlo allá —Frota su entrecejo y Soobin se recuesta en su asiento—. En caso de alguna preocupación: sabemos que no fue usted o alguien de debajo del agua. El barco se estrelló contra pedruscos y por eso de hundió. No encontramos la mayoría de cuerpos. Entre ellos el de Hongjoong.

— ¿En dónde dijo que sucedió?

~ * * * ~

Da risitas divertidas, dando toques a la mejilla fría e hinchada de Hongjoong. Es gracioso como parece estar dormido nada más. Seonghwa acaba de colocar las flores en torno al cuerpo que se infla cada hora un poco más. En diferencia a lo normal, también parece desarrollar una capa traslúcida encima, casi dura. Aún no llega a su rostro y por eso, Seonghwa puede tocar esa parte tan esponjosa.

Acaba de colocar las flores y se marcha por la ventana de su cuarto para ir a buscar más.

~ * * * ~

San se siente muy frustrado. Le ordenaron encontrar el cadáver de todos los fallecidos en el hundimiento de ese barco y aunque aún faltan algunos, el que las brilla por su ausencia es el de Hongjoong. No comprende como la corriente pudo llevárselo tan lejos. Parece imposible y absurdo.

Sus esperanzas de encontrarlo se desvanecen con las horas. Todos en la lista, menos él, fueron hallados. Algunos medio comidos por peces, otros incompletos por cosas del accidente. Fue un área inmensa la que tuvieron que peinar para lograrlo y aun así, nada del humano al que le tomó cariño.

Llega a pensar que quizá un animal ya se lo comió o está aplastado bajo escombros. Un par estaba así, pudieron recuperar apenas partes de esas personas. Tal vez Hongjoong corrió la peor de las suertes, tal como sus gafas rotas y tiradas en el fondo marino.

The boy who found his soul || SeongJoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora