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Mis padres fueron por mí a la escuela para recogerme, ese día estaba
lloviznando y pasaron por mí para que no me mojara. Ese día Mar, Darío y otro
compañero estaban conmigo, yo creí que al subirme rápido al auto, mi mamá
no lo vería, pero estaba equivocada, si lo vio, supo quién era, dejamos a Mar
cerca de su casa, y después nos dirigimos a la mía, al finalizar el día mi mamá
me dijo que cuando le presentaría al chico, que si acaso era el que estaba
conmigo cuando me fueron a recoger, lo negué, pero a una madre no la puedes
engañar, ya sabía quién era, le dije que pronto.
Hice planes para presentarlo, el acepto la invitación, pero por un motivo
personal tuve que cancelarlo, mi mamá hizo que hablara con mi papá sobre
presentar al chico, yo no estaba segura de decirle a mi papá, pero al final tuve
que acceder, cuando le comente de presentarle a un chico con el fin de conocerlo
y si era posible más adelante iniciar una relación, mi papá se quedó serio, no
quiso decir nada, sentía que en ese momento quería que se partiera la tierra y
me mandar a una playa, o donde fuera, en eso mi mamá hablo.
-Dile algo-miro a mi papá.
-¿Qué quieres que le diga? No tengo nada que decir, si ella así lo quiere
no puedo interponerme.
- Ay, contigo. Hija, solo queremos lo mejor para ti, la finalidad de que
nos lo presentes no es como para que te espantes, no lo rechazaremos,
solo queremos saber con quién te estas involucrando.
En ese momento mi papá decidió hablar.
-Si quieres traerlo y presentarlo está bien, solo ten en cuenta que eres
joven, no me gustaría que te desviaras de tus metas por una relación, te
he dicho estudia, para que en un futuro no le batalles como nosotros, para
que te compres tus cositas sin depender de un hombre que te diga “todo
lo tienes por mí”, para que viajes, disfruta tu soltería, pero si quieres
conocer a alguien no te lo niego, hazlo, pero que sea conforme a nuestra
idea, como Dios nos lo marca, un varón conforme a su corazón, un varón
que quiera amarte y te respete, alguien que te ayude a crecer, no un
hombre que sea irresponsable, ni uno que quiera ponerte una mano
encima, sabemos que el hombre que Dios tiene para ti llegara, sigue los
consejos de Dios todos los días de tu vida y veras como progresaras en
todo.
Por un momento quería llorar, mi padre es un hombre reservado, pero cuando
hablaba, a veces era de una manera tan sensata, que me hacía ver que estaba
muy joven para saber lo que quiero.
-Estas en todo tu derecho de enamorarte hija-continuo mi mamá- solo
queremos saber que se puede confiar en ese joven.
Al final, no se concretó la cita, cuando le volví a decir, me dijo que ya no podía
los domingos, solo entre semana, y mi papá no estaría presente, entonces ya no
le vi el caso, mi corazón no veía lo que mis ojos percibían que más adelante
entendería.
Conforme pasaba el tiempo, veía que su actitud me confundía, lo sentía seco y
frio, y después cálido, pero a pesar de eso me seguía gustando como el día en
que dejé que estos sentimientos por el crecieran.
Le dije que, si aceptaba la idea de esperarnos como en la siguiente historia de
la biblia, «Jacob, pues, sirvió siete años por Raquel, y le parecieron unos pocos
días, por el amor que le tenía» GENESIS 29.
Y resulta que después Jacob fue engañado y le fue entregada la otra hija en vez
de Raquel, teniendo que volver a trabajar otros siete años más.
Catorce años en total esperando a la mujer que amaba, yo solo le pedí cinco
años, por mi tiempo de estudios en mi carrera, y la de él, el no conocía la historia
a lo cual lo se sorprendió al escucharla, provocando que el aceptara, me
sorprendió, pero decidí que estaba bien, en lo personal, una parte de mi pensó
que no aceptaría.
Cuando quise volver a confirmar la promesa, lo dudo, me dolió, me dijo no sé,
dejémoslo al destino, mi corazón no lo quería aceptar, mi mente sabía la verdad,
pero el corazón era necio, lo nuestro no funcionaria, teníamos ideas diferentes,
planes diferentes, no sería posible y solo me lastimaba.
Nos seguíamos tratando como novios, sin serlo, estábamos llenando un vaso
con gotas de agua, que en algún momento llegaría a su capacidad máxima y se
derramaría...

¿Quien Tuvo La Culpa? ¿Él o Yo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora