demons ✨ muke

d i e c i s é i s

Dos malditas semanas después.

Cerré la puerta con fuerza y me dirigí enfadado a mi habitación, intentando controlar mi furia.

Cuando llegué, tomé la primera cosa que se me cruzó y la arrojé contra el muro. No me importó que se haya roto la lampara. No me importó que tuviera que limpiar después.

Me dejé caer, mis rodillas contra el frío suelo, ugh. Me sentía el ser más odiado de todos.

Desde que había salido del hospital y vuelto al instituto todos habían estado ignorandome, como antes. Y con todos, sí, también me refiero a Luke.

Y como si fuera poco, me lanza miradas extrañas. No sé si me tiene miedo, o si quiere que yo lo tenga.

Unas lágrimas comenzaron a salir, bueno, muchas. Grité un par de cosas, me dejé llevar. Quería descagarme en algo, quería... estar en los brazos de Luke.

—Joder...—llevé las manos a mi cara. Suspiré.—Si nunca te hubiera contado... si nunca hubiésemos hablado...

Me senté completamente y escondí mi cara húmeda entre mis piernas.

—No me dejes, Luke...—lloré aún más fuerte.

[...]

Un par de pasos más y ya estaba en la cafetería. Al llegar, no hice nada. Últimamente había dejado de almorzar. No me sentía con ganas de hacerlo y con el desayuno y cena me bastaba.

Simplemente me senté unas mesas atrás de Luke, observándolo. Hasta ahora, era lo único que podía hacer, ya que él no me dejaba decirle ni una palabra. Veía cómo se reía con sus amigos, incluso Calum, y me quise largar a llorar justo ahí.

¿Porque me tiene que tratar así? ¿Acaso nunca me amó? ¿Nunca quiso estar conmigo?, esas preguntas y más estaban constantemente en mi maldita cabeza, y haría cualquier cosa por sacarlas de allí. Necesitaba respuestas.

Se levantó y, en un momento a otro, nuestras miradas se cruzaron. Yo la mantuve el mayor tiempo posible con una mueca sin expresión, mientras que él, sin embargo, volteó al instante.

Suspire por milésima vez y tomé mi mochila, para dirigirme hacia Luke.

Mierda, tengo que hacerlo. Tengo que hablar con él. Tengo que enfrentarlo.

Como estaba de espaldas, toqué su hombro. No sabía que era yo quien quería llamar su atención y me miró sonriente.

—Luke, yo—su cara cambió por completo. Por fin, después de mucho tiempo, pude ver sus ojos de cerca. Ese hermoso celeste no había cambiado, aún seguía profundo y encantador, sin embargo, se encontraba en una mirada triste. Quizá arrepentida.—¿Podemos hablar...?-murmuré. No tenía mucho valor.

Hizo una mueca.

—Hoy no Michael, lo siento.—dicho eso se fue junto a Calum, dejandome más deprimido que nunca.

No me lo voy a pensar más, ya está.

Estoy harto, cansado, de que me ignore. Si él no me quiere, entonces no hay nada que pueda hacer, más que irme de este mundo.

Y sólo porque la persona que me enseñó a ser feliz, ahora es lo que más me deprime.

*

Mañana actualizo un cap largo porque hace tiempo que no subía jejj

Las amo muchísimo! Gracias por el apoyo, de verdad.

Adiós preciosas