Luffy x Harem

LAS HERMANAS

Resumen:

Después de que Nami y Nojiko le mostraron las maravillas de hacer el amor, Luffy lentamente se convierte en un maestro sexual, listo para conquistar a todas las mujeres en su camino para convertirse en el Rey de los Piratas. Luffy x Harem. No es necesario hacer sugerencias, iré por orden de arco.

Notas:

Esta historia está publicada en fanfiction.net, y este capítulo fue originalmente la precuela de la misma. Pero decidí ponerlo aquí como un prólogo en lugar de hacer dos historias diferentes, ¡así que disfruta!

No es mi historia créditos a Rey E yo solo la traduzco ahora solo lean y disfruten  

: Prólogo ( Las Hermanas )

La fiesta después de la derrota de Arlong podría durar horas sin que nadie se detuviera para respirar o descansar. Sus 8 años de infierno finalmente habían terminado, después de todo. Incluso sus héroes, los cuatro sombreros de paja, que han sido muy heridos, estaban de fiesta como si ni siquiera estuvieran heridos. Los habitantes de la aldea de Cocoyashi estarían siempre agradecidos con ellos; especialmente Nami y su hermana. Luffy, el capitán de la tripulación, no solo se había librado de Arlong y su tripulación, sino que también había vengado la muerte de su madre. Destruyó todo lo que Nami temía y odiaba durante 8 largos años.

Irónicamente, aunque fue uno de los más heridos, fue el más vivo del grupo. Comiendo todo a su paso y cantando junto con Usopp. Sin embargo, incluso cuando todo el pueblo celebró, dos personas desaparecieron. Los que más resultaron heridos en esta historia, Nami y Nojiko. Algunos lo notaron, por supuesto, pero solo dedujeron que querían descansar y finalmente tener la oportunidad de dormir sin pesadillas después de todos estos años. Lo que no sabían era que estaban planeando algo muy diferente al sueño.

Luffy se tragó un plato entero lleno de carne y estaba a punto de hacer lo mismo con otro cuando de repente sintió un golpecito en el hombro derecho. Dio la vuelta y vio a Nami mirándolo con una cálida sonrisa.

" ¡Hola, Nami! ¿Qué pasa? " Preguntó, listo para darle otro mordisco a su cena.

" ¿Podrías seguirme, Luffy? " Ella simplemente preguntó, con las manos a la espalda.

" ¿Te sigo? ¿Dónde? Hay mucha comida aquí, así que no quiero que alguien la robe mientras estoy fuera, " Él respondió mientras señalaba toda la comida.

" ¡En realidad es una sorpresa! Quiero darte un regalo. Te lo prometo, no te arrepentirás. Estoy bastante segura de que será lo mejor que alguien te haya dado, " Ella replicó mientras Luffy se detenía a pensar. De repente, comenzó a babear cuando sus ojos se volvieron hacia la carne.

" ¡Muy bien! ¡Vamos! " Él sonrió.

" No quiero saber en qué estás pensando, pero es bueno saber que estás emocionado, " Nami se dio la vuelta y comenzó a alejarse de él. Luffy la siguió de cerca.

Sorprendentemente, no hizo ninguna pregunta, pero aún sentía curiosidad por saber por qué se iban de la fiesta y se alejaban tanto de ella, caminando en lo profundo del bosque. Todas sus preguntas fueron eclipsadas por su impaciencia por ver la sorpresa. Claramente esperaba comida, y Nami vio a través de él. Sabía que su sorpresa complacería a casi cualquier hombre, pero tenía muchas dudas sobre Luffy. Parecía bastante inocente para este tipo de cosas, pero, de nuevo, podría ser impredecible, ¿quién sabe?

El chico del sombrero de paja miró a su alrededor mientras avanzaban más profundamente en el bosque, aún preguntándose dónde podrían estar haciendo y qué tipo de comida podría estar tan lejos. Sin embargo, se sorprendió cuando vio una casa y un huerto lleno de mandarinas. Debe haber sido la casa de Nami, supuso. Cuando entraron, lo único que le permitió ver algo adentro fue que la luz de la luna se deslizaba por la ventana.