Un disparo se escucho y un cuerpo cayó al piso, cansado el chico suspiró mientras se limpiaba su mejilla, la cual estaba un poco manchada de sangre de la anterior persona.
Se subió a su deportivo y manejó hacia su hogar, después de unos 30 minutos llego a su destino, abrió la puerta de su hogar intentando no hacer ruido para después entrar.
-Uhm? ya llegaste, oso? -Un chico adormilado apareció en el pasillo de su casa, su pelo negro y algo largo despeinado, sus mejillas estaban teñidas de un rosa palo, tenia un playera holgada de color blanco la cual le llegaba hasta sus muslos, de su espalda salian unas hermosas alas color doradas mientras que con su puño se tallaba su ojo derecho.
-Buenas noches pato, lamento haberte despertado- Dijo algo avergonzado el chico, mientras se acercaba a el más bajo y lo abrazaba, poniendo su cabeza en el cuello del chico y disfrutando de el dulce aroma a caramelo que este siempre portaba.
-No pasa nada, cielo, te extrañe -El pato correspondió el abrazo de su amado, mientras acariciaba con su mano los suaves cabellos negros del oso, batallando para no quedarse dormido.
-Yo también te extrañe, patito, ven, vamos a dormir -El oso se separó del pato y le agarro su pequeña y delgada mano, mientras se dirigian a su dormitorio a descansar.
Al llegar a el dormitorio el oso se cambió a una ropa más cómoda, mientras el de alas doradas se sentó en la cama, esperando a que el oso terminara para irse a acostar juntos.
Finalmente los dos se acostaron en su cama, esta era grande pero aún asi los dos chicos se mantenian juntos, él mas pequeño (el pato) enrollaba sus piernas con las piernas del más grande ( el oso) para buscar calor, mientras este abrazaba por la cintura a su pato, y dejaba leves caricias en su suave piel morena.
-Buenas noches, cariño -Dijo el más alto mientras miraba al más bajo, disfrutando de sus ojos color miel.
-Buenas noches, oso -Respondió el más bajo, mientras igualmente miraba los ojos color amatista de su amado, para después con sus mejillas sonrojadas dejar un pequeño beso en los labios del oso, y caer en brazos de morfeo.
El oso suspiró enamorado y esbozó una pequeña sonrisa, para después acompañar a el pato en su dulce sueño.
Nadie de TortillaLand creería que el gran e imponente empresario Spreen se convertía en todo lo contrario cuando estaba con el pequeño pato. Solamente la luna era testigo del gran amor que todas las noches esta melosa pareja compartían. ♡
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Moonlight. ♡
RomanceEn donde la personalidad de Spreen cambia totalmente cuando esta con Quackity, su chico.