𓏲 ๋࣭ ࣪˖ 𝐆𝐞𝐛𝐚𝐤

*:･ﾟ✵ Capítulo Veinticinco ✧:･ﾟ

Sunghoon llevó a Jake a su casa, sus padres no estaban y en casa de Jake estaba su mamá, iba a regañarlo si se daba cuenta que se escapó de clases, pero es qué lo necesitaba.

Suspiró una vez que estuvo en la habitación de Sunghoon, sonrió al recordar como ambos se habían dado placer mutuo en la cama que estaba a una izquierda de él.

— ¿Estás bien? — preguntó Sunghoon, quitándose la chaqueta. — ¿Quieres dormir un poco?, o ¿ver películas?

— ¿Puedo limpiarte? — preguntó Jake, aún viendo las sábanas de la cama.

Sunghoon frunció el ceño.

— ¿Limpiarme?

— Sí. Limpiarte, como un Omega a su Alfa. — explicó Jake, está vez, al fin, enfocando sus ojos en los de Sunghoon.

— Ah. — Sunghoon trago saliva. — ¿Por qué quieres limpiarme?

— Fue algo que dijo ella, acerca de que tú eras de ella y que la estabas tocando, sé que estabas drogado pero- — Sunghoon se acercó a él y colocó sus manos en los hombros de Jake.

— Puedes limpiarme, Omega. — Sunghoon susurró.

Sunghoon se sentó en la cama, y palmeó sus muslos, Jske sonrió y camino hasta sentarse encima de Sunghoon. Le quitó la camisa y enfocó de nuevo su vista en Hoon.

— ¿Me permites limpiarte, Alfa? —preguntó Jake, sus ojos brillando en dorado.

— Soy tuyo, Omega. — contestó Sunghoon, sus ojos brillaron en rojo.

Jake sonrió, inclinándose al cuello de Sunghoon y lamiendo desde ahí hasta el hombro. El Alfa cerró los ojos y suspiró.

— Acuéstate, amor mío. — susurró Jake en el oído de Sunghoon mientras lamia el lóbulo de la oreja. Sunghoon se dejó caer en el colchón y Jake se acomodó mejor en él.

Del hombro siguió a lamer el pecho, lo lamio todo, hasta los pezones de Sunghoon, lamio las costillas del Alfa, el abdomen, sus brazos, los dedos de las manos, llegó hasta la pelvis.

— Necesito... — Sunghoon se levantó un poco para que Jake se despojara de sus pantalones.

— Gracias.

El Omega quitó también la ropa interior.

Era algo tan intimó, que se sentía tan bien, era otra forma de jurarse amor y de que siempre cuidarian el uno del otro.

Jake lamio los muslos de Sunghoon, y siguió hasta que terminó de lamer todo el cuerpo de enfrente.

— Vuelta. — susurró. — Sunghoon sonrió somnoliento. — Buen Alfa.

Jake siguió y lamio toda la espalda, los omóplatos, los lumbares, todo, hasta que no hubo gota de piel vacía.

Sunghoon estaba dormido para cuando Jake terminó, el Omega sonrió dejando un besito en la espalda de Sunghoon.

Se bajó de encima con cuidado y decidió bañarse, tomó una toalla y ropa de Sunghoon, se dedicó tiempo a él en ese baño, se despojó de toda su ropa, y lavó su cuerpo despacio, suspiró y soltó unas cuántas lágrimas.

Yue.

Yue había sido su mejor amiga y a la vez su peor enemiga.

Terminó de ducharse y salió, se vistió con la ropa de Sunghoon y se observó al espejo.

— Eres un Omega que merece ser amado. — susurró mientras se analizaba en el espejo. — Y tu Alfa merece que su Omega lo amé.

Salió del baño y observó a Sunghoon aún dormido en la cama, tapado con una sábana fina, sonrió y se acercó a la cama para subir en ella y acurrucarse con Hoon.

Su Alfa.

— Te amo, Hoon. — susurró. El Alfa apretó su mano en la cintura de Jake y hundió su cara en el cuello del Omega.

Sunghoon dejó un besito en el hombro de Jake.

— Te amo muchísimo más, Jake. — susurró. — Soy completamente tuyo y de nadie más.

— Soy tuyo, Alfa. — Jake dejó un beso en la nariz de Sunghoon. — Completamente tuyo y de nadie más.

Jake pudo entender por fin que ahora sí, todo estaba en su lugar, que Sunghoon era su Alfa y que Yue no merecía nada de él.

...