Delphinium - Zosan

Capítulo 4: Thistle

Thistle: asociado con la agresividad, el dolor, la protección y el orgullo.

Sanji no podía creerlo.

No quería creerlo.

El policía de pelo verde con problemas de orientación estaba ahora sentado frente a él en una hamburguesería llamada "Bonney's Burgers", después de haber caminado por la misma manzana suficientes veces como para que Sanji le parara y le preguntara por qué demonios seguía girando a la izquierda, sólo para recibir un cállate, sé adónde voy.

Eso fue hace casi quince minutos.

Solo acabaron en Bonney's Burgers despues de que Sanji dedujera que era la "buena hamburgueseria" a la que se referia Zoro, ya que solia frecuentar la cadena de comida rapida con sus amigos. El insaciable monstruo carnívoro conocido como Luffy probablemente se enfadaría con Sanji por no haberle invitado, pero ese era otro problema para otro día. No podía soportar a demasiados idiotas a la vez.

Había estado relativamente contento con su mundana vida adulta. Cinco días a la semana, se levantaba antes de las ocho, se duchaba y se vestía antes de conducir con Nami hasta Delphinium para abrir la tienda. Allí, pasaba las nueve horas restantes en el trabajo hasta que se ponía el sol, y luego cerraba para irse a casa o, en ocasiones, visitaba Franky's para ver a sus amigos. En los dos días libres, normalmente preparaba comidas y cenas para la semana siguiente, repasaba sus habilidades como esteticista o hacía yoga mientras escuchaba su lista de reproducción o podcast favorito.

Entonces llegó el sábado 11 de abril, o mejor dicho, el día en que aceptó una invitación a comer con un policía al que acababa de conocer después de que unos matones le robaran.

"Entonces, ¿por qué me has pedido que vaya a comer contigo?". Sanji decidió abrir con la pregunta que había estado en su mente durante más tiempo del que debería y maldita sea, se merecía una respuesta en este momento.

"¿Por qué no?" Zoro respondió con la boca llena de patatas fritas.

"¿Preguntarle a alguien por qué no? no es una respuesta adecuada". ladró Sanji.

No sabía por qué Zoro le ponía tan nervioso, simplemente lo hacía. Si tenia que estar en su presencia por mas tiempo, entonces habia una gran posibilidad de que le pusieran una multa por agredir verbalmente a un policia.

"Tenía hambre y tú también parecías hambriento, así que, ¿por qué no?". Zoro elaboró.

"¿Pero por qué no le preguntaste al otro policía?".

"No seas estúpido, ricitos. ¿De verdad crees que el hecho de que los dos abandonemos la escena del crimen sólo para poder atiborrarnos de comida va a quedar bien? Hay que seguir el procedimiento adecuado. Puede irse cuando volvamos".

Sanji se hundió en su silla. El tipo tenía razón.

Hubo silencio despues de eso asi que decidio empezar a picar sus papas fritas para que su estomago se calmara.

"¿Por qué ese nombre?" preguntó Zoro.

"¿Por qué me llamaron Sanji?" Sanji intentó encontrarle sentido a la repentina pregunta de Zoro. "No lo sé. Nunca conocí a mis verdaderos padres ni mi nombre de nacimiento, si es que lo tuve, ya que me crié en un orfanato del norte hasta que mi padre me adoptó. Supongo que simplemente me pusieron el nombre de Sanji".

Sanji se sorprendió de que todo eso saliera de su boca, y nada menos que a un extraño. Se preguntó si sería sólo el cansancio que sentía o la explicación menos probable de que Zoro tenía una supuesta manera de derribar sus muros.

"Tu nombre no, el nombre de la tienda", aclaró Zoro, sonriendo para sí al ver cómo el rubor se extendía por las mejillas de Sanji.

"¡Entonces deberías haberlo desde el principio!". Si no fuera por la aversión de Sanji a desperdiciar comida, le habría lanzado una patata frita. "Elegí Delphinium porque mi amiga Robin dijo que era la flor que me representaba. Ella es florista así que..."