My Hot Gangsta +18 [Completada]

21

Jimin

Nos detuvimos cuando escuchamos a los demás.

—Ajem —dijo Tae.

—Lizzy, mami y papi se están reconciliando así que puede que muy pronto tengas a tu familia unida —dijo Tía mirando a Lizzy.

—No le digas eso —tomé a Lizzy en mis brazos— No quiero hacer algo que Kat no quiera.

—Quiero que estés al lado de tu hija, que seas parte de tu vida. Pero te tomará más que eso, así no se si de verdad cambiaste.

Además que está Jungkook no puedo dejarlo después de lo que ha hecho por nosotras dos.

—Pero Kat... —dijo Nat.

—No... Deben entenderme a mí, la vida de mi hija es lo que más me preocupa ahora así que ella necesita a su padre, por ahora eso es solo lo que me importa.

—Esta bien, no te obligaremos a nada, ni bromearemos con ello —dijo Nat.

—Gracias por entender, ahora solo me gustaría disfrutar la velada.

—Ok, vamos todos a sentarnos mientras Yoongi y yo terminamos de cocinar —dijo Jin.

—Me parece buena idea —Kat mencionó.

*

Después de cenar salí afuera a respirar, quiero recuperar a Kat, es el amor de mi vida y no puedo, no quiero perderla. Se que lo he dicho muchas veces solo que no sé cómo hacerlo. A ella le gustaba el viejo Jimin exepto por los maltratos, solo debo ser quien solía ser solo con ella.

—¿Algo te pasa, cierto? —Tae preguntó.

—Me molestó oírla hablar tan bien de Jungkook. La necesito conmigo Taehyung, la quiero dónde ellas pertenecen que es aquí bajo mi protección.

—Esa mujer te ama aunque le cueste aceptarlo o demostrarlo. Si eres tú mismo la recuperarás.

—Es cierto, solo debo ser yo mismo —le sonreí y él palmó mi hombro— A ella le gusta el Jimin chico malo, debes volver a ser él, solo quítale un poco a la violencia, ok.

Cuando volvemos a la sala, están las chicas hablando de los preparativos para la boda.

—Bueno creo que es hora de que me vaya —Kat se levantó de la mesa.

—Te llevo —me ofrecí pero ella niega.

—Vine en mi auto, tranquilo.

—Te acompaño a tu auto.

Ella llevaba a Lizzy en sus brazos mientras ella solo reía de mis caras, Kat tampoco podía evitar reír. Ayudé a colocar a la niña en su asiento, le doy un besito en su frente.

—Appa —ella me estiró sus bracitos y la abracé llorando. Quiero irme con ellas, estar a su lado.

—Jimin... —sentí la mano de Kat en mi hombro, su mirada es dulce y sus ojos tienen lágrimas. La atraigo hacia mí y le doy un beso. Uno de esos besos que solía darle.

Ambos nos separamos después de unos minutos, jadeando. Pasé mi pulgar por sus labios y ella los abrió más, mi pulgar entró en su boca y ella comenzó a lamerlo.

Lizzy no está viendo nada por qué mi espalda tapa nuestras pervercidades pero quisiera hacerle más cosas solo que no puedo si mi hija está presente.

—No te preocupes, gatita —le susurré al oído— Daddy ha vuelto.

*

Kat