-Estás guapísima.- Sigo mirandome en el espejo, poco convencida, aunque Vic piense todo lo contrario. Ya había elegido el diseño del vestido y ya me lo había puesto anteriormente pero no sé... -En serio Alda, ¿Que es lo que no te convence?
Me coge por los brazos y me hace mirarla. Ella lleva puesto su vestido, le queda genial.
-Que he engordado.
-No has engordado, has aumentado tus curvas, te ves genial Alda.- Sé que no me miente pero a mí me cuesta mucho verlo. Mis brazos están engordando, mis pantorrillas también...
-¿Qué pasa?- Damiano se mete entre nosotras dos.
-Alda no se ve bien, aunque en el fondo sabe que es mentira.- Veo como me guiña un ojo, lo veo de reojo pues yo estoy mirando a Damiano quien me está mirando sin disimulo los pechos.
-Pues yo te veo buenas tetas.- Razón no le falta. Vuelvo a mirarme al espejo de mi derecha. Mis tetas también han engordado y el vestido las resalta bastante. Vale, hay partes de mi cuerpo que veo mejor ahora que cuando era más flaca. Victoria le dedica una mirada asesina que veo a través del espejo.- Te ves más sana Alda, estás mejor.
-Supongo que tienes razón.
-La tengo.
-Bájate el ego un poco.- Victoria lo mira mal y yo no puedo evitar sonreír, no me voy a cansar de decir que parecen un matrimonio de ancianos, siempre peleando y discutiendo por tonterías... mis abuelos eran así.
Victoria se acerca de nuevo a mí.
-El caso es que te ves perfecta.- Me coge las manos y me mira sonriente. Veo como duda, mientras tanto Damiano se aleja de nosotras. En un movimiento lento se acerca a mi rostro y deja un pequeño beso sobre mis labios. No me lo esperaba, eso sin duda.
Algo incómoda suelto sus manos. No estoy lista para esto.
-Voy a ver cuando salimos...- Me doy la vuelta y me alejo de ella frotandome la cara.
Salimos pocos minutos después, cada uno en un descapotable blanco. <<Es surrealista... ¡Me voy a casar! >> y lo más raro es que voy a hacerlo con cuatro personas a la vez.
Sentada en la parte trasera del vehículo pues obviamente yo no lo conduzco, siento el aire invernal golpeando mi rostro. En el descapotable de delante mío está sentado Damiano, quien se ha girado para mirarme un par de veces.
No hemos tardado en llegar ya que donde nos habíamos arreglado estaba muy cerca del palazzo Brancaccio, donde nos vamos a casar.
Unas luces rojas me iluminan la cara incluso antes de bajar del auto. Un hombre me abre la puerta del coche y al bajar de él, un montón de flashes de camaras haciendo fotos por poco me ciegan. A mi izquierda hay un mural con el logo de Spotify, pues nos estamos casando por nuestra musica, concretamente por nuestro nuevo album "Rush". ¿Quien iba a imaginar hace unos años que sacaría un album? Me gustaría tener el merito de haber compuesto alguna de las canciones, maldita la Alda del pasado que no se inspiró y no escribió nada.
Fotos, saludos, sonrisas... Entramos al palacio cogidos del brazo con un ramo de rosas rojas entre las manos. Camino por la alfrombra roja en el centro del grupo, con Thomas a un lado y Damiano al otro. Me siento especial, ¿como no sentirme así? Como dicen las novias cuando se casan: Hoy es mi día... "Nuestro" día en relidad... somos cinco.
Alessandro Michele, el propio diseñador de nuestros trajes, nos espera en el altar, listo para casarnos. Un hombre alto, de la misma estatura que Ethan más o menos, con una larga cabellera negra, bigote y barba. Viste un traje verde oscuro de terciopelo y lleva sus gafas puestas.
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Maneskin 4
FanfictionLa vida de Alda continúa y en ella se ejercen cambios, deberá sobrellevar todas las situaciones incómodas y aprenderá a convertir lo negativo en algo bueno, siempre, acompañada por los otros cuatro miembros de Måneskin, quienes siempre están a su la...