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Luego de una jornada agotadora en el restaurante, Fourth regresaba a casa justo antes del amanecer. El muchacho trabajaba para poder pagar sus estudios universitarios y costearse una vida decente en aquel departamentucho que llamaba hogar.

Cuando por un descuido su padre se enteró que era gay fue puesto de patitas a la calle sin más, fue obligado a madurar antes de lo debido y a enfrentar frías noches en banquetas de parques desolados. Por un milagro llamado Mark, su mejor amigo, llegó a su nuevo hogar.

Era un departamento pequeño y tan desordenado tal madriguera de conejos. Ya que Mark se ganaba la vida de apuestas no le era suficiente para alimentar a dos bocas, así fue como Fourth empezó a trabajar en el restaurante Chandi que quedaba tan solo unas calles abajo. Por recomendación de su amigo llegó a ser contratado y gracias a sus ahorros de meses de arduo trabajo comenzó la universidad.

No tenía cabeza para pensar en algo más que no fuera estudios o trabajo, así terminó haciendo cero amigos y aislandose más y más cada día. Lo raro era, ¿cómo alguien que apenas habia hablado con alguien en su universidad recibía un mensaje de este tipo?

"Haz lo que te digo o le enviaré este video a todos. Y sabes muy bien quien será el primero en recibirlo."

Fue lo que decía el mensaje de texto de aquel número desconocido, adjuntado a este, un video.
Estaba borroso, apenas se podía distinguir bien las facciones de la persona en la cinta, la voz era obstruida por ruidos externos pero aún así se podía identificar que se trataba de un chico.

"¿Qué mierda?" Fourth apenas musitó.

blurry | gemfourthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora