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15. Cena en familia

Rio divertida cuando Arthur choca nuevamente  ocasionando que él me fulmine con la mirada, miro a Pascale quien me trae un vaso de agua junto a mis pastillas y le sonrió débilmente, ha sido una lucha interna estar aquí hoy en una cena con la familia Leclerc pero ellos son mi familia en Mónaco y después de tanto insistir, es claro que necesito su apoyo.

- No puedo creer que me hayas ganado. - Arthur murmura divertido mientras ruedo los ojos divertida cuando me abraza. - ¿Que?

- Arthur, me dejaste ganar.

- ¿Que? Claro que no. - El me mira para reír mientras termino de sacar la lengua. - Carla dile que no la deje ganar.

- La dejaste ganar Amore.

Con Carla reímos mientras Arthur niega con la cabeza divertido, ambos se divierten conversando mientras ayudo a Lorenzo y a Pascale con la cena, a pesar que ellos se niegan decido poner la mesa.

- Hola familia. - Escucho el grito de Charles desde la entrada principal y sigo como si nada, no voy a dejar que me afecte. - ¿Hay alguien?

Arthur se levanta rápidamente para mirarme preocupado y no puedo evitar sonreír levemente porque me parece demasiado tierno pero se me borra la sonrisa cuando aparece Charles con su nueva novia.

- ¿Kaia?. - Su mirada de sorpresa me dice que nadie le informo que yo iba a estar acá. - Tu eh ¿Hola?

- Hola. - Murmuro mirando a Charles y después a no sé cómo se llama, quien se encuentra incómoda. - Ire a avisarle a tu madre que llegaste.

Camino rápidamente a hacia la cocina viendo cómo Pascale y Lorenzo ríen indiferentes a lo que ocurre a su alrededor pero cuando Lorenzo me ve sabe que algo no anda bien, llamando la atención de Pascale.

- ¿Pasa algo cariño?. - Pascale murmura con una sonrisa de madre que me hace sonreír. - ¿Te sientes bien?

- Ah mm. - Rasco mi frente sin saber cómo explicarlo y ellos solo me miran. - Debo pensar que no le dijeron a Charles y es por eso que se encuentra acá junto a su novia.

- Merda. - Susurra Lorenzo y yo no puedo evitar reír. - Lo siento mucho.

- Está bien. - Trató de quitarle importancia para sacar dos platos y cubiertos más. - Deberían ir a conocerla y saludar a su hijo.

Ambos se miran para asentir y se van dejándome sola en la cocina, suspiro en un intento de darme ánimos y noto como Arthur me mira desde la puerta.

- ¿Que?

- ¿Quieres escapar?. - Pregunta con cautela haciendo que niegue. - Puedes hacerlo si quieres, viene a presentarla oficialmente.

- Oh eso es... - Aclaro mi garganta cuando la siento seca y lamo mis labios sin saber que decir. - Bonito, van en serio.

- Una mierda. - Murmura divertido para acercarse a mi para abrazarme y besar mi cabeza.

- No digas eso. - Lo empujó divertida ocasionando que ambos riamos. - Es verdad pero él está avanzado y está bien, debe ser feliz.