draco's hospital psiquiátrico (Drarry-harco) HIATUS

Þə ąmœ

Abrio los ojos y miro a su alrededor: era una habitación completamente blanca y tenia camillas.

Estaba amarrado ¿por que estaba amarrado? No lo sabia, no recordaba nada, solo que su nombre era draco, trato de salir de aquella silla pero le fue imposible, como si hubieran drenado toda su energia.

Tuvo un dolor de cabeza fuerte, sonidos estáticos llegaban a su mente.

Vamos a jugar quiditch, sera divertido ¿si?

Esta bien, pero no te dejare ganar como las otras veces.

Siempre dices eso y siempre te vuelvo a ganar

Ay tu calla-þĕ$**...

Abrio los ojos de nuevo, se movio con desesperación y su magia inestable se salio de control.
Todos los artilugios medicos salieron volando a la pared y cayeron generando mucho ruido. Su camilla flotaba pero aún asi no podia liberarse del las correas que lo tenian cautivo.

¿Por que estaba asi? No lo sabia, se mordia la lengua por la frustración y desesperación de salir de alli, la fuerza que aplicaba a tratar de mover sus brazos le hacia daño pero no lo sentía ya que el dolor de cabeza era más fuerte, como tener algo delgado y punteagudo presionando tu cabeza que presionaba su cerebro y lo obligaba a suprimirse.

Soltaba lagrimas y gritos de rabia, pateo una mesita y le salia sangre en el dedo del pie pero no podia importarle menos. Golpeo su cabeza contra la pared sin cuidado, en una de esas veces cayo.

De repente unos maniaticos lo sujetaron y lo bajaron al piso, uno de ellos le abria la boca y otro le daba una cosa muy colorida se lo metio a la boca y le dio algo transparente y lo obligo a tragar.
Después se sacudio con rabia mientras otros lo sujetaban, grito de dolor al sentir una aguja en su cuello.

Finalmente se desmayo por la anestesia y el tranquilizantes, todos los objetos que tenia en los aires por la magia cayeron al suelo estruendosamente.

- ¡es la septima ves esta semana y apenas es martes! Este loquito es el peor de todos.

- no hables asi, me da tanta pena que sea tan joven y este aqui...

- eso da igual, ahora amarrenlo más fuerte, tambien ponganle un collar especial para que su magia sea limitada, ¡y esta vez no olviden los pies!

El joven draco fue dejado de nuevo en aquella sala, despertando de nuevo.

Veia aquella extraña habitación blanca, sin recordar nada más que su nombre. Ni si quiera recordaba lo que habia pasado hace unos minutos.

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Aclaracion: las palabras escritas extraños son como estatica.