◤SOL-AH
Agarré el par de manos cálidas que cubrían mis ojos y mi corazón se aceleró al instante, entre la sorpresa y la curiosidad. Mi mente trató de reconocer el toque familiar antes de girar lentamente y descubrir a la persona detrás de la broma.
—¡Hoseok!— Solté una risa espontánea mientras lo envolvía en un abrazo fuerte, deleitándome con su aroma a vainilla, ese olor tan suyo que siempre me hacía sentir en casa.
—¡Ay! Tranquila, pequeña— Hoseok se rió, devolviéndome el abrazo con calidez. Su risa era contagiosa, llenaba el espacio a nuestro alrededor y me hizo olvidar por un segundo lo mucho que había extrañado su presencia. No podía creer que estuviera de vuelta, después de tantos años sin vernos, desde la graduación, su ausencia había dejado un vacío que no me había dado cuenta de cuánto dolía hasta que lo vi de nuevo.
Hoseok y yo siempre habíamos sido más que simples amigos. Él era mi confidente, alguien con quien podía ser vulnerable sin miedo a ser juzgada. Siempre fue ese amigo que sabía exactamente cuándo regañarme y cuándo escucharme en silencio.
—Has perdido peso, ¿eh? ¿Qué te estresa tanto? ¿O me extrañaste?— Me lanzó su broma habitual, pasándome el brazo por los hombros como solía hacer cuando éramos más jóvenes.
—Probablemente un poco de ambas— Respondí, con una sonrisa suave. —Han pasado muchas cosas desde que te fuiste. Y todavía hay cosas que me pesan... Pero ahora que estás aquí, siento que todo será más llevadero. ¿Por cierto, qué haces por aquí?
—Vine a dejarle unos materiales a mi madre. ¿Recuerdas que es maestra de segundo grado?— Su sonrisa se amplió al mencionarlo.
—¡Claro!— Me reí. —Lo había olvidado por completo. ¡Qué coincidencia!— Nos miramos y nos reímos juntos, como en los viejos tiempos.
Hoseok cambió de tema con la misma naturalidad de siempre, pero sus palabras impactaron más de lo que esperaba: —Escuché que tú y Jungkook ya no están juntos. Pero ¿qué se puede hacer? A veces el amor simplemente se desvanece, ¿no?
Solté un largo suspiro. —Sí, algo así... Aunque todavía tengo pequeños sentimientos por él, también lo odio tanto como amo la comida— Dije, usando la broma para ocultar el malestar que aún me provocaba pensar en Jungkook.
—Hablando de comida, salgamos a cenar. Yo invito— Me sonrió de esa manera que siempre hacía imposible negarle algo.
Asentí, agradecida por la distracción, y después de firmar el registro de la guardería, seguimos caminando hasta su auto. Como siempre, Hoseok fue el caballero que recordaba, abriéndome la puerta con una sonrisa encantadora.
—Vamos, pequeña— Me dijo con esa familiar chispa en sus ojos.
La cena fue tranquila y amena, tal como siempre lo fue cuando estábamos juntos. Mientras esperábamos el postre, me contó sobre su vida en el extranjero, sobre su nuevo negocio y sus planes para establecer uno aquí en Seúl. Cada palabra que decía solo me recordaba lo admirable que siempre había sido, alguien que no se detenía ante nada para lograr lo que quería.
—Gucci definitivamente me inspiró— Dijo, tomando un sorbo de su vino tinto, sus labios rozando la copa con elegancia.
—Eso suena increíble, Hoseok— Respondí con genuina admiración. Siempre supe que él tenía ese toque especial, esa energía que inspiraba a los demás a ser mejores. Me levanté de la mesa y dejé mi bolso. —Voy al baño, regreso en un momento.
Mientras caminaba hacia el baño, no pude evitar sentirme extraña. Había algo en el ambiente que se sentía diferente. ¿Esto era una cita? No podía dejar de pensar en lo fácil y cómodo que se sentía todo, y sin embargo, no podía evitar el nerviosismo que venía con la idea de que nuestra relación pudiera estar cambiando.
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𝐋𝐀 𝐄𝐗-𝐄𝐒𝐏𝐎𝐒𝐀 𝐃𝐄 𝐉𝐔𝐍𝐆𝐊𝐎𝐎𝐊
Fanfiction⚠️ 🔞 ''Si difamas mi nombre, te encontraré y te lastimaré tanto que terminarás en silla de ruedas. El mañana probablemente no existirá para ti si pasa algo". Jungkook apretó la mandíbula y me arrebató los papeles del divorcio de las manos, luego me...