ᕦUnder the fireworksᕤ

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"Obito..." El suave gemido de Kakashi le hace cosquillas en la oreja al mayor. Kakashi se retuerce en el regazo de Obito, aunque no hace ningún esfuerzo por bajarse. Cada vez que gira un poco sus caderas, no puede evitar soltar otro maullido desesperado.

"Todavía no", Obito simplemente se ríe y aprieta con más fuerza la cintura de su novio. “Lo estás haciendo muy bien, cariño. Son sólo dos horas más”.

Kakashi hace un sonido patético y apoya su frente contra el hombro de Obito. Ha estado demasiado acalorado y molesto durante medio día. Hace que la polla de Obito se contraiga un poco dentro de Kakashi. 

Obito no está seguro de qué lo poseyó para sugerir que a Kakashi no se le permitirá correrse hasta la medianoche. Pero Kakashi estuvo de acuerdo, y una vez que el mayor atrapó la polla de Kakashi en la jaula de metal, no hubo vuelta atrás. Para mantener los pensamientos del más joven alejados de su miembro palpitante que buscaba liberación, Obito decidió burlarse del cuerpo de Kakashi de todas las formas posibles.

Sólo una hora antes, había estado chupando y pellizcando los pezones de Kakashi, haciéndolo casi gritar de feliz agonía. Pudo ver cómo la polla enrojecida empujaba contra los anillos de metal, goteando líquido preseminal sin parar. Fue una vista tan deliciosa que la propia polla de Obito se puso completamente dura, lo que los llevó a la situación actual en la que Kakashi calentaba obedientemente la polla de Obito.

El más joven intenta levantar sus caderas, queriendo irritar un poco más a Obito. Pero el mayor se da cuenta de su plan y lo detiene.

"¿De verdad crees que si me haces follarte más rápido, dejaré que te corras?" Su sonrisa se hace más amplia cuando escucha un sollozo en respuesta.

“Por favor… no puedo soportarlo más…”

Obito pasa una mano por el cabello de Kakashi que ya está pegajoso por el sudor. Aunque afuera hace mucho frío, con una capa de nieve cubriendo todo, Kakashi ha estado completamente desnudo durante algunas horas. Es cálido y necesitado, como le gusta a Obito.

El mayor besa cariñosamente la nuca de Kakashi. No puede dejar de pensar en lo afortunado que es de tener un novio tan obediente, uno que comparte casi todos sus intereses sexuales con él.

"Solo un poco más. Te haré sentir mejor que el cielo a medianoche, Kakashi.

Kakashi gira un poco la cabeza para que sus ojos se encuentren. Su mirada está desenfocada pero todavía hay algún pensamiento coherente detrás de ella. Se ve tan encantador así: los ojos brillan con lágrimas y un pequeño hilo de baba en el lado izquierdo de sus labios hinchados.

Obito sabe que Kakashi es muy sensible, especialmente ahora que está desnudo y suplicando ser liberado. Entonces el mayor se inclina y mordisquea el lóbulo de la oreja de su novio, ganándose otro maullido silencioso de su parte.

"¿Sabes lo lindo y dulce que eres, Kakashi?" Obito susurra. "Yo tampoco puedo esperar a medianoche, cariño".

Cuando Kakashi parece calmarse con sus retorcemientos, tomado por sorpresa con los elogios y simplemente respondiendo con un gemido, la mirada de Obito regresa a la pantalla del televisor.

Pasan lentamente dos horas y cuando se acerca la medianoche, Obito puede sentir que su polla también le duele por liberarse. Quiere experimentarlo con Kakashi, así que también se ha estado conteniendo. El interior del más joven es perfecto para calentarlo y mantenerlo duro, aunque en algún momento también cambiaron a la boca de Kakashi.

En el barrio han estallado innumerables fuegos artificiales y algunas personas están demasiado impacientes para esperar hasta medianoche. Pero el cielo nocturno se vuelve cada vez más brillante y colorido a medida que se acerca la cuenta regresiva final. Obito mira a través de las ventanas de su sala de estar y una idea tortuosa surge en su mente.

“Kakashi… Es casi medianoche. ¿Quieres mirar afuera?

Como el peliplateado está completamente delirante gracias a la negación de horas, no lo piensa dos veces antes de asentir. Está dispuesto a hacer cualquier cosa por Obito siempre que le garantice la recompensa que le ha sido negada durante mucho tiempo. Y entonces Obito se levanta y lleva a Kakashi con ambas manos hacia la ventana más grande que da a la calle.

El alféizar de la ventana es lo suficientemente bajo como para que Obito pueda empujar a Kakashi hacia adelante y presionarlo contra el vidrio para que su estómago también toque la superficie fría. El más joven se estremece cuando sus pezones turgentes son forzados contra el cristal, pero Obito está justo detrás de él, asegurándose de que Kakashi no pueda escapar ahora.

"Mira todos esos fuegos artificiales... Todos están esperando la medianoche..." Obito sonríe al ver el reflejo de la expresión desesperada de Kakashi. "Tú tampoco puedes esperar, ¿verdad?"

"Por favor", gime Kakashi. "Por favor, Obito..."

Obito se alegra de haber mantenido la mayoría de las luces apagadas en la casa. Puede admirar los maravillosos tonos de amarillo, rojo y rosa que se reflejan en los ojos llorosos de Kakashi. También les da un poco más de privacidad ya que normalmente sabe que no sería tan atrevido como este.

Después de todo, es una noche especial. Quiere que sea inolvidable y, si Kakashi realmente lo disfruta, una tradición anual.

"¿Estás listo?" Baja la voz mientras sus labios presionan la oreja enrojecida y caliente. "Aquí viene tu recompensa... Te voy a follar tan bien, Kakashi..."

Obito empuja su polla dentro del agujero dispuesto. Apenas hay resistencia ya que Kakashi tuvo tiempo suficiente para acostumbrarse a su circunferencia mientras esperaban. El mayor gime de satisfacción, sabiendo que su propio miembro pronto también encontrará liberación.

No pierde el tiempo empujando a Kakashi profunda y fuertemente. Coloca ambas manos junto a la cabeza de Kakashi, atrapándolo contra su cuerpo caliente y el cristal. Aunque la ventana comienza a vibrar con su fuerte movimiento, Obito ya no puede preocuparse más.

Kakashi es tan cálido y cercano a él que no puede evitarlo. Él folla en su agujero, apuntando su polla justo para hacer que su novio maúlle cada vez más fuerte para ahogar los sonidos de la explosión de los fuegos artificiales.

Ambos dejan de preocuparse por la hora. Puede ser justo antes de la medianoche, o justo después, cuando Obito siente que no puede contenerse más y rodea el cuerpo de Kakashi para desbloquear la jaula de metal. Cae sin gracia al suelo y Kakashi echa la cabeza hacia atrás, aullando mientras se corre con todo su cuerpo temblando. Obito lo presiona con más fuerza contra la ventana mientras empuja unas últimas veces, vaciándose en el trasero de Kakashi.

Sus gemidos y respiraciones pesadas y húmedas se mezclan con el ruido del exterior, donde la gente grita de alegría por el nuevo año. A nadie le importan especialmente las dos sombras desnudas apenas visibles que se presionan contra el cristal.

A la luz de los fuegos artificiales, Obito toma suavemente el rostro de Kakashi con una mano y sonríe perezosamente.

“Feliz año nuevo, hermosa”, dice.

“Feliz… Año Nuevo…” responde Kakashi, apoyando su mejilla contra el frío cristal. "Te amo, Obito."

"Yo también te amo."

Mientras los fuegos artificiales aún suenan, y mientras la polla de Obito todavía está enterrada en el trasero de Kakashi, sus bocas chocan y se olvidan del mundo. Besos, llenos de felicidad.

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