En un grito de furia, el alma de un hombre perdido todo en un segundo,
La creencia de un dios se extinguió... con el furor de las llamas,
El color de los ojos que alguna vez reflejaron alegría
Ahora marcan el paso del cazador, el color de la sangre se refleja
En alguien que ya no tiene una vida... la eterna soledad su compañía.
En el tiempo sin tiempo, conoció a una joven mujer,
Y a al resplandor de la luna, su piel bañada en plata esta,
Solo una diosa podría ser, mi diosa que ha venido a verme.
Esta joven que se enamoro de un hombre misterioso en el lago de la noche.
Él la observa sin emoción y ella en silencio le jura amor y le ha de seguir,
Ignorando las advertencias que le caen como gotas de lluvia, ella camina a él
Una sombra recorre el corazón de aquel hombre sin nombre, sin pasado.
En algún momento olvido que el también amo
A su trabajo su alma entrego, un asesino es
Sin importar la verdad que sus ojos no ven
En este camino que recorrió durante tanto tiempo,
Compañeros de trabajo tuvo, ¿amigos? muertos hace siglos están.
Ahora una joven le acompaña en sus interminables viajes,
Su nombre ¿...? no tiene, no lo recuerda, no lo sabe,
Y en su afán de poder llamarla, Luna la bautizo.
Luna en un camino de no retorno has empezado a caminar
Es lo que él le dice, ahora dime ¿por qué matas?
¿Por qué sigues este camino de muerte y soledad...?
No lo recuerdo, lo único que sé es este camino
No tengo amnesia, simplemente me obligue a olvidar
El tiempo ha borrado de mi lo que alguna vez fui.
Noche tras noche, día tras día
Y así pasaron meses de muerte,
En un camino sin retorno donde
Aquella joven de brillos de plata,
Ahora brilla en tono carmesí,
La sangre de sus víctimas, su propia sangre
Y la sangre del hombre que ama.
En incontables batallas lucharon
Victoriosos cantaron y celebraron
Mientras sus vidas desfallecían
Ignorantes del destino dormían.
La lucha comenzó, las espadas chocaron
La sangre fluyo, los guerreros cansados
La estocada final cedió, y la sombra muerta calló,
La luz de la luna se torno roja, la muerte de su rival se dio.
El destino burlón y trágico una estocada de muerte sentencio.
Luna herida de muerte desfallece bañada en lágrimas del hombre que ama.
Las batallas llegan a su fin en el lago, Aquel lago donde la noche se refleja.
