𝐋𝐀 𝐄𝐗-𝐄𝐒𝐏𝐎𝐒𝐀 𝐃𝐄 𝐉𝐔𝐍𝐆𝐊𝐎𝐎𝐊

𝟏𝟏.|𝐉𝐄𝐎𝐍 𝐉𝐔𝐍𝐆𝐊𝐎𝐎𝐊.

◤SOL-AH◢

Salimos del bar, nos despedimos de los muchachos, Namjoon me da su brazo para que lo siga, me lleva hasta su coche, quedó impactada, pues es un Challenger clásico, 1967 color negro, superelegante y hermoso como él. Abre la puerta para que me suba, entro y huele hermoso a cereza combinado con su perfume, se sube, pone algo de música y me sonríe, ¡Dios esos hoyuelos son hermosos!

—Tú me dices por dónde ir.

—Claro, puedo ponerte el GPS si gustas.

—No, prefiero que tú me guíes para recordar más fácil la dirección— Sonríe.

—Qué bonita sonrisa tienes. (Sorprendida) ... Digo, perdón.

—¿Por qué te disculpas? Muchas gracias.— Rie.

— No quiero ser impropia, pensé en voz alta.

— No eres impropia, me alegra que te guste algo de mí.

Yo me sonrojo, aprieto mi bolso de los nervios, platicamos sobre lo bien que la pasamos. Llegamos a casa, lo invitará a pasar, pero mis padres están dormidos.

— Llegamos.

— Sí, ya... je, je, je... (no quería bajarme).

— ¿Tienes algún plan mañana por la tarde?

— Mmmm... no, trabajo y salgo a la 1 pm y de ahí no tengo nada que hacer ¿Por?

— Te invitará a comer mañana, pero tengo una junta de negocios. Me desocupo a eso de las 3. ¿Te gustaría ir a tomar un café para platicar y conocernos más?

"¡Gracias a todos los Dioses por esto! A dónde tú quieras, voy 😏😏😏"— pensé.

—¿Dónde nos vemos?

— ¿Vernos? No, nada de eso. Yo paso por ti. Cuando me desocupe te llamo.

— ¡Oh! Sí, perfecto. Estaré al pendiente.

Nos quedamos viendo fijamente a los ojos por algunos segundos, si no es que somos interrumpidos por un gato que brinco al cofre.

— Qué gato tan atrevido jejeje.. Bueno Namjoon, espero tu llamada mañana.

—Espera— Se bajó y me abrió la puerta, me dio su mano para que me sostuviera y bajará.

—No quiero irme. Pero tenemos que descansar— me dijo mientras me rodeaba con esos brazos tan enormes y fuertes. Me extraño mucho, ya que los coreanos no son muy afectuosos tan rápido. Yo disfruté ese instante, su aroma era extraordinario, sentía que me iba a impregnar de él. No quería soltarlo, pero tampoco me quise ver muy chica fácil. Me solté, le di una palmada en el hombro y giré hacia la puerta. Él no arrancó hasta que me vio entrar a casa. Ese momento yo me sentía como una princesa de un cuento de hadas.

Al día siguiente llegó a mi trabajo y me encuentro a la "bella y la bestia", estaban buscando un vestido para ella.

—Olvidé que tu oficina está a en esta sucursal—Me dijo mientras me veía de arriba para abajo.

—Lo que ocupes puedes dirigirte hacia cualquiera de las chicas. Con permiso— Le dije con total indiferencia.

— Quiero que nos atiendas tú.

— Lo siento, pero yo no soy vendedora, tengo mucho trabajo. Con permiso.

— ¿Así que este es el modo con el que los empleados tratan a sus clientes? A Hoseok, no le va a gustar tener una mala referencia de su tienda.

— ¿Qué quieres Jungkook?

— Necesito que ayudes a mi novia a encontrar un lindo vestido ya que esta tarde tendremos una comida de negocios y quiero que sea la más linda..