ASMR +21 | Yoonkook

Una ayuda de motel

Jungkook se entregó por completo a OjitosCafe ese seudónimo de uno de las personas que lo veían.

¿Cómo se había dado el encuentro?

La verdad es que para contarlo deberíamos remontarlo al año pasado.

Ambos congeniaron y compartieron muchos chats hasta hacerse amigos por medio de ReadyApp.

OjitosCafe era un oficinista joven, que había tenido problemas para llegar a desempeñar su papel administrativo por el constante abuso de los altos cargos de sus trabajos anteriores. Pero todo apuntaba a que por fin había encontrado su sitio.

El chico era bisexual y un poco kinky no muy distinto a Jungkook, aunque nunca se habían visto en persona.

Por eso, quedaron, y tras el primer encuentro en el que ambos se sintieron cómodos le precedió este -necesitado- encuentro.

Ninguno sabía el nombre real del otro, pero eso daba completamente igual cuando ambos solo querían sexo.

OjitosCafe había tenido un día duro y cansado mientras que Jungkook llevaba cachondo por horas.

Así que el sexo, tras unas copas y entrando al primer motel barato, valió la pena.

Sexo duro, seguro y necesitado. Jungkook agradeció tanto que el chico pudiera ser versátil, porque aunque sabía que el contrario disfrutaba como pasivo, ahora estaba siendo un activo espléndido.

—Bunny, creo que ahora mismo soy el fan más afortunado.

—Gracias por haber accedido. Confío mucho en ti, y sin dudas...eres más guapo y caliente de lo que recordaba. Dice aludiendo a la primera vez que se conocieron. —Espero que esto quede entre nosotros.

—Por supuesto OjitosCafe. No se me ocurriría fallarte. Además, tal y como me dijiste, estoy meditando la posibilidad de abrir mi propia cuenta. Necesito ayudarme con los gastos y...divertirme.

—Seguro te iría muy bien, OjitosCafe.

—Llámame Jimin, GoldenBunny. Se siente raro si no que me digas por ese apodo.

—Jimin. Es un lindo nombre.—Dice riendo. —Mmm yo confío en ti, pero me da cosita decir mi nombre.

—No te preocupes Bunny, ¿te puedo seguir diciendo así, no?

Asiente.

—Es importante que te sientas cómodo. Y de verdad, muchas gracias por haber quedado conmigo...y todo lo demás. Hablé con CrazyGatito hace unos días y me dijo que hablaste de nuestro encuentro. Siento habérmelo perdido. Encima, no guardaste el Live.

—Ya. Se me pasó. La gente estaba celosa por ti Jimin.

—Soy un privilegiado, lo sé.—Dice atando el condón para tirarlo a la papelera.—¿Deberíamos irnos ya?

—Yo creo que me quedaré. Estoy muy cansado.

—Dejaré pagado para que puedas quedarte la noche entera. Me iré primero para no incomodarte Bunny.

—Eres el mejor. Gracias, llega bien a casa.

Cuando el chico se va, Jungkook sigue con el nudo en la garganta. ¿De verdad podrá confiar en ese hombre?

No lo sabe, pero lo espera porque ha sido una buena cogida, sin embargo, a pesar de todo.

Jungkook sigue pensando en AgustD.

Y por eso abre su chat.

Chat Privado con GoldenBunny

GoldenBunny: buenas noches Ahjussi! Esta?

GoldenBunny: parece que no está, yo sólo quería desearle un lindo día!

GoldenBunny : Bueno, linda noche* ya me equivoqué jajaja

GoldenBunny: Y me preguntaba si uso mi video? Yo use mucho mi imaginación y usted estaba en ella 🫠

Pero Yoongi no contesta nada porque esta viendo una película en el sofá con su hijo mientras comen palomitas.

Y no es hasta cuando se van a dormir cuando ve su móvil y la nueva publicación de GoldenBunny así como la notificación del chat privado.

•••

La publicación es una foto del trasero de Jungkook con un pene entre sus mejillas. Algo que hace abrir los ojos a Yoongi.

Para  luego leer los mensajes que GoldenBunny le ha dejado y formar una mueca.

¿Por qué si tanto lo pensaba se metió con un tipo para que lo llene? ¿Por qué otro había sido el afortunado?

Por la misma razón de sus propios pensamientos incoherentes y celosos prefirió no contestar nada y cerrar la aplicación.

Necesitaba calmarse, pero terminó masturbándose con la imagen subida. Aún si ese no era su pene, su imaginación haría el resto y luego, tras llegar a su clímax, la resaca de emociones y culpabilidad le golpeó fuerte haciéndolo sentir asqueado.

—No debo seguir haciendo esto...