Stiles es un Winchester...

Visitas inesperadas

Las cosas extrañas y sobrenaturales se habían vuelto parte de su vida, en realidad, Stiles casi sentía ganas de vomitar cuando recordaba las semanas atrás, antes de que escuchara por "accidente" que habían encontrado la mitad de un cuerpo en La Reserva de Beacon Hill's; al principio considero que era una idea magnifica ir hasta allí y buscar él mismo sus propias pistas para tener algo más con lo que acercarse a Noah, claro que no tomo en cuenta las posibles variables, en un pueblo como Beacon, nada extraño ocurría, no tenía sentido considerarlas.

Su pierna derecha se movía de arriba abajo tan rápido, que casi sintió un calambre, entonces cambio la pierna en movimiento para tomar un descanso. Sus ojos no se despegaban de la pantalla, se relamió los labios dejando que sus dientes frontales se encajaran con fuerza en el inferior, la ansiedad fluía de su cuerpo como si de una energía eléctrica se tratase, tal vez beber tantas bebidas energizantes no fue la mejor de las ideas, sin embargo, le ayudo a mantenerse despierto para dar con lo que buscaba.

Scott seguía sin atender a sus llamadas por lo que decidió dejar de insistir después de la medianoche y se concentró en su labor, estiro el brazo para alcanzar la nueva lata de bebida energética que había abierto minutos atrás cuando diviso un par de luces delantera enfrente de su casa, frunció el ceño confundido, reviso la hora.

El reloj marcaba casi las cuatro treinta de la madrugada, nadie decente se atrevía a molestar al Sheriff a esa hora.

Se quitó el volumen y con todo el cuidado que fue capaz de tener se acercó hasta la ventana un Chevrolet Impala del 67 negro brillante estaba estacionado justo detrás del auto de Noah, pasaron algunos segundos hasta que el copiloto descendió del vehículo; la figura, pese a ser alta y delgada, también parecía un poco encorvada, sus pies se arrastraron hasta que atravesaron todo el camino de entrada de la casa.

El sonido del timbre retumbo por la silenciosa casa. Stiles salto en su lugar con el corazón latiendo a gran velocidad, dejo su lugar en la ventana, se tropezó con sus propios pies al intentar llegar a la puerta de su habitación, cuando logro abrirla casi se estrelló contra el cuerpo de su padre, que parecía tan confundido como el mismo.

—¿Qué haces despierto? —interrogo Noah en medio de un bostezo.

—Tocaron la puerta —Stiles se encogió de hombros —. ¿Esperamos a alguien?

—No. Quédate detrás de mí, por favor.

Con cuidado, los dos descendieron por las escaleras, sin encender alguna luz, caminaron hasta la puerta de entrada. Noah vaciló unos segundos cuando sintió la respiración acelerada de Stiles golpear en su nuca.

—¿Quién es? —pregunto con la mano sobre la cadena de seguridad.

—Hola —la voz de afuera sonaba algo torpe, tal vez un poco ansiosa —, soy yo, nosotros. Sam y Dean, ¿nos recuerda tío Noah?

Noah abrió la puerta después de eso, Stiles se asomó detrás de él para poder ver a su primo, que sonreía de una forma extraña. Detrás de él, la puerta del auto sonó de nuevo cuando fue cerrada de nuevo.

Dean Winchester con su cabello recortado en su forma habitual y su cazadora de cuero se acercó con una sonrisa tranquila en sus labios, la cual Stiles correspondió casi de inmediato.

—Lamentamos la hora, habríamos llegado antes si alguien no nos hubiera demorado tanto. —Dean le dio un abrazo a Noah, para después entrar a la casa y darle uno a Stiles.

Sam no tardó en adentrarse en el lugar también, parecía bastante feliz de estar en un sitio cálido de nuevo. Noah bostezo pasándose las manos por el rostro, los hermanos Winchester se pusieron cómodos en el sofá e incluso encendieron algunas lámparas.