ATRAPADAS EN LA PENUMBRA

Capítulo 3

Capítulo 3

Un día pasó y Jennie despertó, había soñado que estaba en su reino junto a su hermana y sus padres, todo era como siempre y nada malo había sucedido, lamentablemente había despertado y aquello generó que se diera cuenta de la horrible realidad que estaba viviendo, estaba encerrada en un calabozo siendo una maldita esclava, mientras que su hermana estaba quizás en que garras.

Nuevamente con mucho esfuerzo se puso de pie, tenía que comenzar a limpiar aquel lugar, pero al dar el primer paso cayó, su cuerpo estaba débil y por obvias razones su espalda estaba destrozada a más no poder, tres días no bastarían para limpiar aquel lugar.

Por otro lado, Tiffany no había podido dormir absolutamente nada por pensar en todo lo que estaba pasando, pensaba en su querida hermana, no se quería ni imaginar que le estaban haciendo, o quizás había corrido con más suerte que ella y estaba en un lugar mejor, solo rogaba que pronto estuvieran juntas para marcharse de aquel espantoso mundo.

Se escuchó como la puerta se abría y automáticamente su cuerpo se tensó por completo, a los pocos segundos vio al príncipe que se acercaba a ella.

—Que buena decisión tomaste, ya estaba preparado para buscarte y devorarte por desobedecerme.

Tiffany lo miró con miedo cosa que hizo que aquel hombre riera de forma burlesca.

—Ayer tuve una discusión con mi padre, él quiere que tenga un hijo poderoso para que en un futuro gobierne este reino, hay una mujer calificada por él para que se convierta en la madre de mi futuro hijo, pero yo no estoy de acuerdo, aunque aquello no quiere decir que no vaya a tener un hijo.

—¿Y por qué me cuentas eso?

—Porque ayer me di cuenta de algo importante, tú eres la indicada para ser la madre de mi hijo.

Tiffany sintió un frio recorrer su cuerpo, lo que le estaba diciendo aquel hombre no era bueno.

—¿Yo?

—¡No me hagas repetirte las cosas! —dijo un tanto irritado. —Hoy comeremos con mi padre y te presentaré ante él, espero te sepas comportar.

—¡No! Yo no quiero, yo no soy de este lugar, estar aquí fue un error.

—¡Si no haces lo que quiero, serás ejecutada!

Muchos pensamientos pasaron por su mente, no tenía como elegir alguna opción, si no hacía lo que ese tipo quería, estaba muerta. A su cabeza vino su hermana, quizás aquel hombre podía ser el camino para llegar a ella.

—En un momento vendrán algunas mujeres para que estés vestida apropiadamente para la comida, luego vendré a buscarte.

Sin más que decir, la dejó sola. A los pocos minutos llegaron unas mujeres, ni siquiera la saludaron, solo comenzaron a tomarle medidas y luego se marcharon, no sin antes decirle que debía bañarse.

Pasó una hora cuando estaban nuevamente con ella, le habían diseñado un vestido negro, se lo puso y luego la peinaron y maquillaron, ya estaba lista para conocer al rey.

—Padre, hoy comeremos con alguien.

—¿Con quién? —Pregunto sin mirarlo.

—Una mujer.

—Espero que sea la mujer por la cual hemos discutido, la futura madre de tu hijo.

—Algo así, pero no hablo de Sunny.

Donghae lo miró, su rostro no mostraba agrado.

—¡¿Piensas desobedecerme?!

—tendré un hijo, pero no con esa mujer, sino con otra.